Representantes del colectivo AHT Gelditu y del sindicato LAB han denunciado este miércoles en comisión parlamentaria la "explotación" de los trabajadores de las obras del TAV en Navarra, en su mayoría extranjeros.

Por AHT Gelditu, Enea Andueza ha señalado que desde este colectivo han recabado testimonios de trabajadores de las obras del TAV, que denuncian sus condiciones laborales.

Se trata, ha dicho, de trabajadores contratados por grandes empresas que "tienen un amparo institucional y una inspección de trabajo que a propósito se hace de una forma débil".

AHT Gelditu ha presentado en la comisión un vídeo en el que un extrabajador de las obras del TAV asegura que no hay control sobre el uso de equipos de seguridad, se realizan jornadas "de 12, 14, 18 y hasta 20 horas" y se dan "insultos y humillaciones" a obreros.

En las obras del TAV, afirma esta persona, "la droga abunda" y los trabajadores son "tratados como esclavos".

Inko Iriarte, de LAB, quien ha destacado que en 2024 hubo en Navarra 30.000 accidentes traumáticos reconocidos y 26 trabajadores muertos, ha indicado que la patronal "no cumple la reglamentación" de prevención de riesgos laborales.

Subcontratas del TAV

Grandes obras como las del TAV, ha resaltado, se adjudican a unas UTE que después subcontratan con otras empresas que tienen fundamentalmente trabajadores extranjeros "de pueblos más pobres" que en ocasiones ni dominan bien el idioma.

De esta forma, ha agregado, "esos trabajos quedan fuera del control sindical" y los trabajadores "no conocen ni sus propios derechos". Al respecto, Iriarte ha declarado que el que en toda Navarra solo haya diez inspectores "es una decisión política para contentar a la patronal".

Iriarte ha denunciado que en las obras del TAV se hacen horas extras "masivas", hay falta de prevención de riesgos y se utiliza "maquinaria inadecuada". Ha considerado que esta "agresión a los derechos de los trabajadores" es una situación que "se repite en diferentes obras públicas".

Además, ha afirmado que en el sindicato "preocupan las futuras enfermedades profesionales" que puedan sufrir estos trabajadores por la presencia de contaminantes físicos y químicos.

El sindicalista ha enfatizado que en la promoción pública "hay que plantear que exista un control del Gobierno" y hay que ser "especialmente estrictos en ámbitos donde no hay una organización sindical" y se da la "impunidad" de las empresas.

Ha reclamado la paralización del proyecto, ya que "se requiere una reflexión general" sobre el mismo.