Noche electoral de contrastes ayer en Catalunya. Mientras el PSC supuso el ejemplo más explícito del voto útil para frenar a la ultraderecha y se erigió en ganador inapelable, con 19 escaños (siete más que en 2019), ERC se dejó por el camino prácticamente la mitad de apoyos, al pasar de 13 a siete diputados. 

Junts se mantuvo prácticamente igual y pasó de ocho a siete representantes en el Congreso, aunque el cómputo global de cara a quién ocupará el sillón de Moncloa le otorga un protagonismo especial, ya que su abstención, como mínimo, puede ser determinante para que Pedro Sánchez repita en el cargo. La candidata de este partido, Míriam Nogueras, advirtió en su primera valoración de que “no haremos presidente a Sánchez a cambio de nada”.

Cabe destacar también el buen papel de Sumar, que se aupó a la segunda plaza empatada a siete escaños con ERC y Junts. A la formación republicana, que tenía a Gabriel Rufián como cabeza de lista, le ha acabado pasando factura el giro posibilista protagonizado por el president de la Generalitat, Pere Aragonès, y que le han llevado a erigirse en uno de los principales apoyos de Sánchez en el Congreso en la pasada legislatura.

En su valoración de los resultados, Rufián afirmó que “el dilema más que nunca es Catalunya o Vox”. Interpeló directamente a Pedro Sánchez y Yolanda Díaz y aseguró que “si quieren gobernar su país deberán respetar el nuestro”. Se dirigió además “al resto del independentismo para que nos pongamos de acuerdo, la gente nos lo pide y no tenemos que trasladar nuestras responsabilidades a la gente”. Opinó que “sería un fracaso que no nos pusiéramos de acuerdo y que la gente tenga que votar eternamente”, y remarcó sus exigencias a Sánchez: “Respetar nuestro país, acabar con el déficit fiscal, acabar con el infierno de Rodalies y que nadie se baje de la mesa de negociación” entre la Generalitat y Moncloa. 

Fuera de plano se quedó la CUP, que perdió sus dos escaños. El PP subió en Catalunya sumando cuatro diputados más a los dos que tenía y Vox mantiene sus dos plazas en esa comunidad.

Reparto por comunidades

En Galicia, el PP ganó tres escaños (pasó de 10 a 13) y el PSOE perdió otros tres (de 10 se quedó con siete). Sumar amarró dos representantes, el BNG mantuvo a su único diputado y Vox continuó, una vez más en unas elecciones generales, con el casillero a cero.

Mientras, en Canarias resultó vencedor el PSOE, empatado a seis escaños con el PP; mientras los socialistas subieron un diputado, los populares obtuvieron dos más, pero el partido de Pedro Sánchez se impuso en número de votos. El mapa insular se completa con Coalición Canaria, que tendrá voz en el Congreso al rascar un escaño, Sumar con otro, y Vox también con un diputado (pierde uno).