elizondo - El río Bidasoa disfruta de buena salud y el nivel de calidad de sus aguas es más que aceptable, de acuerdo con el avance de la revisión 2015-2021 del Plan Hidrológico que trabajan la Confederación Hidrográfica del Cantábrico y las respectivas autonomías, Navarra y la Comunidad del País Vasco. La revisión del documento ha llegado ya a su tercera fase, la que se corresponde con la consulta pública y que tendrá una duración de seis meses.

En la demarcación existen cuatro cuencas compartidas con Francia, las del Bidasoa, Errobi y Ugarana o Urdazuri, Nive y Nivelle los dos últimos para los franceses, y tres entre Navarra y Gipuzkoa: Urumea, Araxes y Leitzaran. La parte del Bidasoa que comparten Navarra y Gipuzkoa tiene una superficie de 751 kilómetros cuadrados (km2), mientras que la parte francesa abarca unos 25 km2, lo que supone aproximadamente un 3% del total de la cuenca.

El Ugarana o Urdazuri, por su parte, nace en la pequeña cuenca de Zugarramurdi y de Urdax/Urdazubi (que forman los arroyos que descienden de Alkurruntz, Artxuri y otros montes circundantes) cuenta con 373,6 km2 de superficie, de éstos 70,7 km2 (12%) están en territorio del Estado español y 302,9 km2 del Estado francés. Por último, la cuenca del Errobi, con 1.032,8 km2 de superficie, tiene 121,4 km2 (casi el 19%) en territorio español y el resto, (81%) en territorio francés.

En el listado de masas de agua naturales, en lo relativo al río Bidasoa se ha pasado de “muy modificada a natural”. Por lo tanto, según el trabajo de revisión, “la evolución positiva del estado y el cumplir con los criterios de buen estado de una masa natural, no justifica seguir manteniéndola como muy modificada”.

Las “masas naturales” que alimentan al Bidasoa son las de sus dos brazos en los que nace en Baztan (19,5 y 18,8 km. de longitud), Beartzun (5,4), Artesiaga (11,6), Marín y Zebería (14,9), ya en Malerreka los ríos Ezkurra y Espelura (35,2), su propio segundo tramo (en 34,2 km.), Latsa (8,2), Tximista I (6,5), Tximista II(9,3) y Endara, de 6,7 kilómetros de longitud. Y en lo que respecta al Ugarana o Urdazuri, el río Olabidea de 15,4 kilómetros, y al Errobi las regatas de Urritzate y Aritzakun de 10,8 kilómetros de longitud.

demanda En lo referente a la demanda, el uso urbano abarca los consumos conectados a redes de abastecimiento urbano, uso doméstico de la población residente y la turística, usos municipales e institucionales, el uso comercial y el industrial conectado a la red. Además, incluye el suministro a explotaciones ganaderas conectadas a las redes de suministro urbano y los volúmenes dedicados al riego de jardines, llenado de piscinas, riego de pequeños huertos de carácter urbano y otros, todo bajo la denominación de riego urbano.

La demanda doméstica en el Bidasoa se eleva a 5,14 hectómetros cúbicos (un hectómetro cúbico son mil millones de litros), la turística es de 0,12 hm3, la industrial (2,92 hm3), el riego (0,05 hm3), la ganadería (1,09 hm3) y la municipal, que es de 0,33 hm3. La demanda total urbana en baja es de 9,66 hectómetros cúbicos y en alta es de 14,47 hectómetros cúbicos.

Y la posible evolución de la demanda-consumo en alta se espera que vaya en descenso conforme se detecten fugas y los aprovechamientos incontrolados. Si ahora es de 14,17 hectómetros cúbicos, se espera reducirla a 13,39 hm3 para el 2021 y a 13,02 hm3 para el 2027, lo que sería el 0,70% de mejora. De momento y una vez que el Plan Hidrológico 2015-2021 se ponga en marcha y a pesar del aumento de las captaciones en afluentes, la salud del Bidasoa es buena.