pamplona - La mina de potasa que prevé explotar la empresa Geoalcali a caballo entre Aragón y Navarra, en concreto en los términos de Javier y Sangüesa, dejaría vía impuestos 137,26 millones de euros en las administraciones públicas navarras. Es uno de los datos más relevantes que ofreció ayer en el Parlamento la consejera de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local, Isabel Elizalde, en una comparecencia en la que informó de que el Gobierno está a la espera de conocer la respuesta a las alegaciones que ha presentado y aseguró que su departamento realizará un seguimiento “muy de cerca” del proyecto industrial.

Elizalde compareció ayer, días después de que la Plataforma que se opone a la mina alertara en la misma comisión parlamentaria de las consecuencias ambientales y sociales que, a su juicio, tiene el proyecto Muga.

las alegaciones Elizalde señaló que al afectar el proyecto a dos comunidades, es el Ministerio de Industria el que tienen la competencia ambiental. El Gobierno navarro ha presentado en el periodo de información pública diez alegaciones y está a la espera de conocer la respuesta. La tramitación ambiental tardaría cuatro meses. En las alegaciones presentadas, Navarra pide que se defina mejor el proceso de rellenado del hueco minero con los propios residuos, el sellado del vertedero por fases, de manera progresiva y sin esperar al final, o que se garantice la inexistencia de afecciones a los edificios y terrenos en superficie. Se demanda también otra alternativa al tendido eléctrico previsto, que pasa por una ZEP y por el tramo medio del río Aragón, así como que se construya una variante en los accesos. Navarra solicita asimismo mejorar el estudio paisajístico y replantear la distribución de las instalaciones en superficie, así como construirlas lo más al sur posible del Camino de Santiago. Otras alegaciones hacen referencia a la necesidad de un estudio de campo de la fauna catalogada, al cumplimiento de la legislación en materia de ruido y a la vigilancia ambiental del proyecto, con la emisión de informes con carácter anual, entre otras cuestiones.

Los grupos parlamentarios agradecieron, en términos generales, la información “precisa” de la consejera Elizalde y algunos pidieron evaluar los beneficios y los riesgos del proyecto Muga en un proceso de participación ciudadana.

Mª Carmen Segura (UPN) concluyó que de las explicaciones de Elizalde se desprende que “no ha habido irregularidades en la tramitación”, tal y como había sostenido hace unos días la Plataforma opositora, y dijo que “no es bueno crear alarma social”. Confió en el “buen hacer” de los técnicos a la hora de que se cumpla la legalidad.

Por su parte, el socialista Santos Cerdán incidió en que la mina puede revitalizar una amplia zona de Navarra y dio credibilidad a una empresa que “ya ha puesto 16 millones de euros”, dijo. Desde el PPN, Ana Beltrán argumentó que solo los 137 millones que llegarán a las arcas públicas “ya es un dato más que suficiente para que este sea un proyecto interesante”.

mayor participación Tanto Geroa Bai, como EH Bildu y Podemos-Ahal Dugu se refirieron a la importancia de contar con la máxima información y articular mecanismos de participación pública. Unai Hualde (Geroa Bai) dijo que el Gobierno “ha hecho la tarea”, mientras Maiorga Ramirez (EH Bildu), expresó su satisfacción por las explicaciones de Elizalde, aunque abogó por “exponer las dudas sin miedo”. Así, se preguntó qué pasará cuando la mina se cierre después de 20 años, o con el IVA, al estar la mina en dos comunidades.

Eduardo Santos (Podemos-Ahal Dugu) reconoció que “no nos gusta el proyecto porque no compartimos este modelo”, e hizo hincapié en la participación para debatir todas las alternativas, incluso la de “no hacer nada”. Aseguró asimismo que buena parte de las inquietudes de la Plataforma han sido asumidas por el Gobierno en las alegaciones.

Marisa de Simón (I-E) reconoció que la consejera le había aportado “bastante tranquilidad” tras la “alarma” suscitada en la comparecencia de la Plataforma y argumentó que “va a haber daños ambientales, lo que hay que hacer es minimizarlos y luego decidir”.

230

hectáreas. Comprende el proyecto de mina Muga que desarrolla la empresa de capital australiano Geoalcali en los términos aragoneses de Undués de Lerda y Urriés, y los navarros de Sangüesa y Javier. La boca de la mina está prevista en Undués de Lerda y la planta exterior, en Sangüesa.

2

millones de toneladas anuales. Se extraerían de la mina. 1.050.000 toneladas serían de potasa y una cantidad similar de sal sódica.

20

años. Es la vida media estimada de la mina, según la consejera.

10-40

camiones por hora. Sacarán el material de la mina hasta los puertos cantábricos.

511

empleos. Están previstos en la fase de explotación. Según la consejera Elizalde, la mina estaría “a plena producción” en 2018.

356

millones de inversión. Geoalcali prevé invertir 201 millones de euros en la construcción de la mina y 155 en la fase de explotación.