Óscar Chivite, consejero de Cohesión Territorial del Gobierno de Navarra, fue el encargado de abrir la jornada con un discurso que marcó el enfoque colaborativo de la iniciativa. “El acuerdo de legislatura firmado por los grupos políticos que sustentan al gobierno así lo establece. Por ello, seguimos con la Estrategia de Lucha contra la Despoblación de Navarra aprobada en 2023 como instrumento de planificación pública transversal”, afirmó. Según explicó, esta estrategia guía la acción del gobierno en su esfuerzo por crear condiciones sociales y económicas que favorezcan el asentamiento poblacional en las zonas más vulnerables de Navarra. La Ley Foral de Despoblación y Desarrollo Rural es precisamente una de las dos normativas que su departamento está elaborando, además de la Ley Foral de Ordenación del Territorio y Urbanismo. 

En cuanto a la Ley Foral de Despoblación y Desarrollo Rural, Chivite destacó que será una herramienta esencial para garantizar la igualdad de oportunidades en toda Navarra. Entre las medidas que incluirá esta normativa, mencionó estímulos al emprendimiento rural, acciones para facilitar el relevo generacional, la rehabilitación de viviendas y la mejora del acceso a los servicios públicos. La segunda normativa en materia urbanística busca simplificar los procesos administrativos y reducir los tiempos de tramitación en los planeamientos generales. “Somos conscientes de que la actual normativa es complicada de aplicar. Por eso, uno de los ejes de esta ley será una nueva regulación para el uso del suelo rural, que hará más sencillo trabajar y vivir en el territorio”, explicó. 

El consejero también enfatizó la importancia de la colaboración interdepartamental para abordar este reto de forma integral. “Esta ley necesita medidas en todos los ámbitos. El futuro del medio rural de Navarra es un reto de la sociedad en su conjunto y precisa de un modelo de desarrollo cohesionado”, apuntó. Según avanzó, la previsión es que la tramitación de esta ley comience en junio de 2025 (el anteproyecto del Gobierno que coordinará Cohesión Territorial estará listo para esta fecha), una vez que se cuente con el aval de la Comisión Interdepartamental y el grupo impulsor para la lucha contra la despoblación. Esta futura ley foral, que será muy participada, trata de recoger las inquietudes y propuestas que trasladan las entidades locales y los agentes territoriales para favorecer la vertebración de Navarra desde una mirada rural.

Chivite destacó la necesidad de escuchar las propuestas de los asistentes al encuentro, entre los que se encontraban alcaldes, representantes empresariales, sindicatos y colectivos sociales que trabajan sobre el terreno. “Este es un buen escenario para recoger qué necesitan nuestros pueblos y las personas que viven en ellos para encarar el reto demográfico”, aseguró. El consejero hizo hincapié en la importancia de una voluntad política y social compartida para que las iniciativas logren un impacto real. “Tengo claro que poco podrán hacer los pueblos más pequeños si no hay voluntad social y política entre administraciones, entidades y colectivos para tomar decisiones determinantes que favorezcan el asentamiento de las personas en los municipios”, reflexionó. 

Además, destacó el modelo de gobernanza del Pirineo como un ejemplo de cooperación y coordinación que podría aplicarse en otras zonas como Tierra Estella, la Zona Media o Sangüesa.  

En su cierre, Chivite lanzó un mensaje de optimismo y compromiso colectivo. “Es necesario contar con todos vosotros. Este departamento está inmerso en una tarea importante, pero juntos podemos dar un futuro a nuestros municipios”, concluyó. La jornada fue una muestra de cómo la cooperación entre agentes públicos y privados, junto con la implicación de los actores locales, puede marcar la diferencia en la lucha contra la despoblación. El evento dejó claro que el desafío demográfico requiere un enfoque a largo plazo, pero también decisiones inmediatas que favorezcan el asentamiento y el desarrollo en las zonas rurales más desfavorecidas. Navarra, bajo el liderazgo de su Gobierno y la colaboración de los sectores implicados, parece decidida a afrontar este reto con determinación e innovación.