e momento no se han visto atascos que era lo que podía ocurrir, ha sido una idea muy buena", reconocía ayer un trabajador del polígono de Villava. Con el objetivo de solucionar los problemas de aparcamiento y ampliar los espacios peatonales, el Ayuntamiento de Villava impulsó hace un par de semanas la reordenación de la variante para su conversión en una calle más del casco urbano. La amabilización ha supuesto la transformación de la Avenida Pamplona de Villava en una calle de 30 km/h, la misma limitación que la permitida en el casco urbano. Asimismo, se han instalado cuatro lomos de asno nuevo, dos por sentido. A falta de retoques de pintura la avenida ya es transitable y enlaza con siete pasos de cebra, tres de ellos nuevos, no sólo el casco urbano con el polígono, también el monte Ezkaba. El proyecto permite a su vez ganar alrededor de cien plazas de aparcamiento junto a la mediana central. Muchos comerciantes de la zona reconocen la dificultad que suponía encontrar un sitio para aparcar el coche. Plazas ocupadas por los vecinos de la villa que trasladaban el problema de aparcamiento en el centro de la villa. "Antes era un caos para aparcar, alguna vez incluso he tenido que ir al parking del supermercado", señala Saray Medina, trabajadora de Sofa Desing. "Venir con el coche era un problema. Para los comercios nos ha venido estupendo", reconocía a su vez Nekane Azcárate empleada de Six Days Motos. Desde la panadería Arrasate, Félix también acoge con optimismo la medida en un polígono "muy saturado de coches". También se ha logrado, dijo, aminorar la velocidad en una carretera que resultaba "peligrosa" para muchas familias que venían a "pasear o a comprar". No cree por otro lado que se formen atascos al no tratarse de una vía de alta densidad. Otros comerciantes creen además que la amabilización desvía el tráfico hacia la Ultzama por los túneles de Ezkaba, sobre todo el paso de vehículos pesados reforzando el carácter de vía urbana que ya tenía la variante.

Pero no sólo los clientes y trabajadores valoran el cambio, vecinos, viandantes y deportistas insisten en la importancia de los nuevos pasos de peatones que enlazan ambas zonas, la urbana y la comercial y de servicios. "Está muy bien más que nada para nosotros, los mayores, que venimos a pasear", subraya Gaspar Virto, vecino de Burlada que no obstante defiende la instalación de semáforos para regular los nuevos pasos de cebra. "Sigue siendo un cruce muy peligroso", asume. "Solemos ir con los niños al monte y ahora es mucho más seguro", asegura Daniel Itsaso que utiliza los senderos de la ladera como zona de esparcimiento. Opinión compartida por Cindy Lindo, de Villava: "Vengo todos los días a pasear y la verdad que ha sido una transformación muy positiva".

Laura Guzmán, empleada del establecimiento de juguetes y mobiliario de jardinería Toy Planet destaca a su vez el avance que ha supuesto la creación del carril bici en el polígono. "Vengo todos los días en bicicleta a trabajar y resulta muy peligroso circular junto con los coches". Subraya además la importancia de contar con ciclovías, "paso miedo, la gente no respeta", añade.

La ampliación del aparcamiento del polígono viene a paliar la pérdida de plazas que ha supuesto el incremento de espacios peatonales en las calles Ricardo Bel, Esteban Armendariz, Fermín Tirapu y Oianpea del casco urbano. Uno de los principales cambios se ha llevado a cabo en la calle Ricardo Bel que suscita opiniones encontradas . Desde quienes opinan que esta nueva obra ha supuesto una mejoría para mantener la distancia de seguridad, hasta los que defienden lo contrario. "Ha sido una gran chapuza", señala José Luis Lafoz, de Loterías Osasuna. "Antes aparcaban aquí, compraban y se iban, ahora les cuesta venir andando", reconocen otros comerciantes. Una visión diferente es la del peatón. "Me parece estupendo sobre todo para los viandantes", confirma Nieves Ardanaz. "Para venir a comprar esta mucho mejor, es más fácil respetar la distancia; sin hablar de la cantidad de bocinazos que había", añade otro residente. "La prioridad somos los peatones, ya hay plazas de aparcamiento a unos metros", subraya José Luis Oyeregui.

Para el concejal de Urbanismo Etor Larraya, los cambios en movilidad han tenido un efecto positivo, que también redundará en la dinamización comercial del polígono. "Hemos sacado furgonetas y autocaravanas del centro del municipio, la velocidad se ha reducido, y se está utilizando, la gente lo valora bien".

"Vengo todos los días a pasear al monte y la transformación ha sido muy positiva"