- Estella incrementa su patrimonio mural con tres obras más de Garbiñe Basarte. Unas obras que amplían las creadas el año pasado en la Plaza de Toros y el mural de 114 metros cuadrados donde recreó antiguos escaparates de comercios de la ciudad del Ega. Ahora ha elegido una de las cajas de registro de la Confederación Hidrográfica del Ebro para convertirla en un cubo de rubik al final del Puente de la Vía y en la misma ribera del Ega. “En principio iba a ser un simple cubo pero luego apareció la figura del martín pescador, un pájaro que me gusta mucho y también la posibilidad de hacer una pasarela de acceso que juegue además con las tres dimensiones” aseguró Basarte.
La segunda de las obras inauguradas ayer fue el escudo de Estella en la céntrica calle Baja Navarra “aquí había una estrella de Estella que hubo que quitarla por seguridad y se nos ocurrió que podría ponerse este escudo que aparece cuando hay lluvia” aseguró el concejal de Servicios, Jorge Crespo.
También se mostró las pinturas que adornan las escaleras del Barrio de Lizarra. “Esta vez he elegido una pintura La niña de la playa de Joaquín Sorolla, un cuadro que de niña ya pinté para regalárselo a mi madre” aseguró ayer Garbiñe. Una artista que convive mientras realiza sus obras con los vecinos y vecinas de cada barrio “cuando acabo me da mucha pena irme porque ya he conocido mucha gente que se acerca cada día a preguntarme si necesito algo o a ofrecerme un café”.
El próximo trabajo previsto en la ciudad de esta artista local se encuentra en los muros de la calle Gigantes y Cabezudos que recientemente recuperó su placa desaparecida desde hace varios años y que reflejará parte de esta comparsa de Estella-Lizarra. La artista ha recibido el apoyo de los vecinos mientras que el ayuntamiento ha costeado el material.
