- La consejera de Derechos Sociales, Mari Carmen Maeztu, insistió ayer en su comparecencia en el Parlamento para informar sobre la situación de la residencia Tomás, Lydia y Javiera Recari de Cáseda y las inspecciones realizadas para garantizar la correcta atención de sus residentes, en que no ha habido denuncia alguna de familiares de las personas usuarias, ni de las trabajadoras con ocasión del conflicto laboral durante la negociación de su convenio con la empresa, en la que esta abandonó la dirección del centro a finales de febrero.

Añadió la titular que su departamento constató un normal funcionamiento en su inspección del día 10 de marzo y así lo comunicó en un informe de fecha 22 de abril, con algún requirimiento sin precisar.

La citada inspección se llevó a cabo a raíz de tener conocimiento en su departamento del abandono de la gestión de la anterior empresa y de la búsqueda de una nueva por parte del Ayuntamiento, titular de la residencia. Hechos que sucedieron al inicio del año tras un conflicto laboral, que reconoció como tal, hoy solucionado con la nueva entidad gestora. Indicó que esta "subrogó al personal y asumió el retraso de salarios", un pago que se demoró por gestiones del cambio de inscripción de la empresa en Hacienda, apuntó.

Maeztu puso de relieve el compromiso de las trabajadoras, máxime en tiempo de pandemia, abogó por la vía correspondiente en el caso de existir denuncias concretas, y reiteró el papel de su departamento de velar por el cumplimiento de requisitos técnicos y humanos, independientemente de la titularidad de estos centros.

La consejera compareció a petición de urgencia del grupo parlamentario EH Bildu, después de que el gerente, Miguel Ángel Cuevas (concejal de Navarra Suma en Barañáin) abandonara la residencia sin previo aviso a las trabajadoras y sin abonarles la nómina del mes, además de dejarles con pocos recursos para abastecer a las 52 personas usuarias. Solo comunicó su decisión al alcalde, Jesús Esparza.

El sindicato LAB (única representación) e Izquierda de Cáseda, Kasedako Langileak (oposición en el Ayuntamiento) lo denunciaron públicamente, y ayer la parlamentaria Patricia Perales (EH Bildu) aludió en su intervención a "ese periodo de vacío en el que quedaron las trabajadoras como únicas responsables" por el que interpeló al Gobierno por su actuación de entonces. También por su responsabilidad de garantizar el mismo servicio con herramientas para evitar hechos como este, "de dejación absoluta del servicio y abandono como si de objetos se tratara".

Añadió Perales la crítica a las empresas sin escrúpulos "que no garantizan un servicio de calidad, ni los derechos de las personas usuarias y trabajadoras. Un ejemplo de mala gestión", resumió increpando a la parlamentaria María Álvarez (Navarra Suma). Cabe recordar la coincidencia de afiliación de esta con el anterior gerente, y con el alcalde de Cáseda, único conocedor de los hechos por aquellos días, por lo que la parlamentaria recalcó su parte como máximo responsable municipal.

Para Álvarez, no ha habido ni abandono ni vacío, y tampoco hay tema, si no "un ataque a la gestión privada y una movida sindical que genera desconfianza. La residencia está bien, tal como revela la inspección", señaló.

Para Nuria Medina (PSN) el problema ha sido laboral y "no ha afectado a la calidad asistencial", significó . Al hilo de Álvarez, aludió a la "instrumentalización de los mensajes tremendistas que generan desconfianza", y ambas subrayaron que "en la anterior legislatura EH Bildu no impulsó ningún cambio de modelo".

Precisamente, para Geroa Bai, el cambio de modelo de atención a las personas mayores centrado en la persona está en el trasfondo de la cuestión . Su parlamentaria, Isabel Aranburu, calificó la actuación de la empresa de "reprobable y concerniente al Ayuntamiento" y censuró la privatización con ánimo de lucro "que prioriza beneficios sobre la calidad".

Finalmente, Marisa de Simón Grupo Mixto-Izquierda Ezkerra tildó la marcha de la empresa de "abandono precipitado y sin justificación en 9 días en plena negociación laboral". Recalcó como "inadecuada" la gestión del Ayuntamiento y abogó por avanzar hacia la gestión pública de las residencias.

"Dejaron solas a las trabajadoras y a residentes como si de objetos se tratara"

Parlamentaria de EH Bildu

"No fue abandono, es un ataque a la gestión privada y una movida sindical"

Parlamentaria de Navarra Suma

"Ha sido un conflicto laboral que no ha afectado a la calidad asistencial"

Parlamentaria del PSN

"Una conducta reprobable y un modelo que prioriza beneficios a la calidad"

Parlamentaria de Geroa Bai

"Un escándalo de gestión y un abandono injustificado en plena negociación"

Grupo Mixto-Izquierda Ezkerra