Este miércoles el Ayuntamiento de Tudela ha abierto el Corredor Verde, la remodelación del paseo del Prado cuyas obras comenzaron en diciembre de 2022 y han tenido un coste de casi 4 millones de euros, de los que 1,3 millones proceden de los fondos Next Generation.

Los trabajos se han prolongado tres meses más de lo esperado en un inicio pero se abren antes de Semana Santa pese a las dificultades que supusieron las recientes inundaciones.

EL PROYECTO

El nuevo paseo del Prado tiene una superficie de 65.000 metros cuadrados y tiene un parque infantil de 600 metros cuadrados (que ha quedado rodeado de arena y no de arbustos como antes), además de numerosas zonas verdes y una playa verde junto al Ebro donde se han colocado tumbonas y sombrillas como de piscina.

La CHE no permitió acondicionar el soto cercano ni crear una escalera por debajo de uno de los arcos del puente del Ebro, por lo que las obras se han limitado al paseo del Prado, la zona del embarcadero con un nuevo parking urbanizado y la mejora de los carriles bici.

En total cuenta con 454 árboles, si bien para su realización se talaron 63, 13 se trasplantaron y 18 se pusieron nuevos. También cuenta con un bar que ahora deberá ser adjudicado.