Señora alcaldesa del valle de Guesálaz: Permítame que, sin ánimo de ofender y con cierta tristeza, le diga que es bastante despistada. Acabo de enterarme que, emulando a ciertos políticos, sin percatarse seguramente, ha duplicado el cobro de algunas dietas en FNMC y Mancomunidad de Valdizarbe. Son de pequeña cuantía, es cierto, pero no deja de ser un despiste un tanto raro. Es una pena. No importa si es o no punible o solamente se trataría de un apoderamiento distraído. No importa mucho, pero algo sí. Tal vez tengan algo que ver en el despistamiento los ayudantes de los que se rodea, tal vez las gentes que le apoyan. Tal vez. Es una pena, porque, quiéralo o no, es un borrón -o varios- en su currículo.

Me han dicho también que ostenta varios cargos aparte de los que la alcaldía lleva inherentes. Parece que tiene alguno en la FNMC, en la Mancomunidad de Valdizarbe..., a los que debe atender con la debida diligencia. Y es sumamente importante tener mucho cuidado en controlar la cuantía de las dietas que le ingresan sin que usted se dé cuenta. Porque la eficiencia no es solamente llevar a buen término los asuntos municipales que tiene encomendados, sino que también cuenta el control de los fondos que se emplean en ellos. Acaparar puestos, sin desempeñarlos correcta y completamente no es bueno.

Permítame, también, que le exprese mi preocupación porque, según he oído, en los presupuestos aprobados recientemente no consta que los concejos participen demasiado en la solidaridad distributiva que se espera de los ayuntamientos. En la gestión pública, ahorrar no es bueno. Tampoco endeudarse demasiado. Lo que se tiene, se debe gastar en beneficio de todos los habitantes del valle atendiendo sus necesidades públicas. Guardar en el calcetín puede ser bueno en la economía doméstica, pero no en la economía pública.

Señora alcaldesa: Aprovecho para expresarle mi extrañeza por prescindir (aunque tuviera potestad para hacerlo) de varias de las personas elegidas por el pueblo a pesar de no ser de su candidatura, cuando es evidente que todos los concejales son necesarios para hacer frente a las múltiples tareas que este valle tiene el deber de acometer. Ellos están deseosos de ayudar. ¿Por qué lo hace usted?

Permítame decirle finalmente que no tengo otro afán que el de contribuir a que este valle, nuestro querido valle de Guesálaz, esté cada vez mejor gestionado por todos, en bien de todos y con los recursos de todos.