Respetando la opinión de Mª Rosario respecto al tema, dos cuestiones que se me ocurren como profesora y madre que soy. Primera: ¿con qué autoridad y profesionalidad puedo participar en el proceso de enseñanza-aprendizaje de mi alumnado y ayudarle a conseguir los objetivos marcados en el currículo si yo no los domino? Y segundo: sobre todo como madre decir que no me hubiera gustado nada que el profesorado de mis hijas no hubiera sabido que árbol o fénix llevan tilde por razones obvias que sobra explicar aquí.