Pamplona - Luis Sabalza (Sangüesa, 1947) acumula solo ocho meses de experiencia como presidente de Osasuna, aunque admite que le han parecido una eternidad. Tras la agónica salvación del pasado curso, el sábado comienza para él una nueva aventura deportiva, aunque su verdadero caballo de batalla se lo ha encontrado en los despachos. Tras sortear dificultades y polémicas de las que, con mayor o menor fortuna, ha ido saliendo airoso, ahora afronta el inicio liguero con optimismo en lo deportivo y en lo económico, ya que aspira a una temporada sin sobresaltos y a solventar su deuda con Hacienda antes del plazo legalmente acordado y establecido por la ley. Eso sí, lo uno depende de lo otro. Y viceversa. Así lo ve el presidente.

Se han cumplido sus primeros ocho meses como presidente de Osasuna, pero ¡vaya ocho meses!

-Con todo lo que ha pasado, prácticamente me parece que llevo aquí toda la vida. No me esperaba encontrar la situación que me he encontrado, pero hay que afrontarla con ilusión y con ganas de hacer que Osasuna vuelva a ser lo que siempre ha sido.

En lo deportivo, ¿cuál es el objetivo del equipo?

-Que se consolide en Segunda División. Que hagamos una temporada sin sobresaltos, manteniéndonos y, si puede ser, mirando hacia arriba, nunca hacia abajo. No hay un objetivo claro ni conciso de buscar el ascenso, lo cual no quiere decir que, si sale, lo vayamos a desperdiciar. Evidentemente, eso sería de tontos, pero el equipo no se ha formado con la idea de subir.

Y más después de lo que pasó la pasada temporada, en la que el equipo se salvó en Sabadell con un gol en el último minuto del último partido...

-Evidentemente. Me gustaría hacer una campaña parecida a la que hicieron el año pasado equipos como el Mirandés, la Llagostera o la Ponferradina. Es decir, en esa línea de estar siempre cerca de los puestos de promoción.

A una semana del estreno liguero y después de los seis amistosos de pretemporada, ¿cómo ve al equipo?

-Veo una plantilla que tiene una cierta ilusión de volver a ser un equipo. A mi juicio, el año pasado los jugadores estaban un tanto desilusionados porque habían descendido y pensaban que iba a ser relativamente fácil subir. Pero este año la gente está muy concienciada de que hay que trabajar, de que no va a ser un mundo de facilidades y creo que nos vamos a mantener bien.

Enrique Martín Monreal salvó a Osasuna en las últimas jornadas y sigue como entrenador, aunque la junta directiva tardó en anunciar su continuidad. ¿Por qué?

-Costó porque nosotros habíamos cerrado la contratación para la temporada pasada. Es decir, que para esta no teníamos la obligación de seguir igual. Y no quisimos hacerlo de corrido porque, si no, daba la sensación de que era una obligación que siguiera, pero Martín fue nuestro principal candidato desde el primer momento.

¿Es plena la confianza de la directiva en el entrenador?

-Sí, sí, claro que sí.

¿Qué le parece el trabajo que hizo en la recta final del curso pasado y el que está realizando ahora?

-Martín es un hombre que tiene, como él dice, una etiqueta de salvador y revulsivo. Y ya hablamos sobre esto. Le dije: “Enrique, vamos a hacer un equipo de un año, no me los mates en diez jornadas”. Y me contestó: “Yo tengo esa etiqueta, pero ya no soy así”.

¿Cómo le ve?

-Ilusionado y con ganas de hacer un equipo competitivo. Piensa que puede y debe ser un gran entrenador para Osasuna.

El entrenador repite mucho que, “en tres años, el 80% del equipo tiene que ser gente de casa”. ¿Suscribe esta afirmación?

-Sí, porque esa es la política de esta directiva. Siempre hemos pensado que tienen que jugar los de casa. Aunque la limitación de las 18 fichas profesionales es grave, no debe serlo tanto porque debe servir para que los jugadores de la cantera tengan más oportunidades de jugar.

¿Lo hacen por convicción o por obligación económica?

-Por convicción. Desde que entró esta directiva, siempre he dicho que lo primero es que los chavales sepan que pueden jugar en el primer equipo, una posibilidad que se había cortado durante un tiempo porque no subía nadie. En primer lugar, hay que crear esa ilusión de que todo chaval sepa que, si vale, puede llegar al primer equipo. Y en segundo lugar, entendemos que el sentimiento de la afición es que jueguen muchos jugadores procedentes de la cantera. Otra cosa es que, si no salen jugadores, tengamos que buscar fuera. Pero la idea de apostar por un equipo de cantera es por convicción, no por un aspecto económico.

En sus ocho primeros meses como presidente ha tenido que afrontar un sinfín de problemas burocráticos, incluido el estallido del caso Osasuna

-Y lo sigo diciendo, pero no por mí, sino por Osasuna. A mí lo que me dolía era la imagen que se estaba transmitiendo del club. Estaba en los tribunales, en los periódicos, en la apertura de los telediarios nacionales, etcétera, etcétera. Y no por aspectos positivos, sino por circunstancias negativas. Por eso me daban ganas de llorar, no porque yo estuviese preocupado. Sabía y sé dónde me metía, aunque no esperaba encontrar tanto, pero sabía y sé que me atrevía a llevar la gestión de Osasuna. Lo que sí me preocupaba era la imagen del club.

¿Se le han pasado las ganas de llorar?

-Sí, porque creo que se va remontando. Por ejemplo, hemos conseguido prácticamente los mismos socios que el año pasado y eso quiere decir que la gente, a pesar de una temporada tan dura, está con Osasuna, y eso me da ánimos.

¿Es la afición uno de los mejores activos del club?

-No es uno de los mejores, es el mejor. He estado viendo los partidos que hemos jugado por la Ribera y la gente se despedía hasta Palamós, donde jugamos el primer partido de Liga. Eso quiere decir que hay ilusión de seguir viajando.

¿Cómo se explica eso después de lo que ha pasado?

-Los sentimientos no tienen explicación y la gente siente a Osasuna. No sé si Osasuna es lo más importante de Navarra, pero es uno de los aspectos más importantes que tiene Navarra y une a muchos navarros.

Hablemos de números. ¿Es Osasuna un club viable tras la aprobación de la ley de la refinanciación de su deuda?

-Sí, y se lo dije el otro día a la señora presidenta (Uxue Barkos). Con la fórmula de la ley, Osasuna pagará su deuda en siete años, cuando nos han dado plazo para hacerlo en 30. Y lo voy a justificar con números reales. En Segunda nos van a dar más o menos 5 millones de euros de media por los derechos de televisión. El 25% de esta cantidad, que ya está solicitada a la Liga de Fútbol Profesional (LFP), va directamente para pagar la deuda con Hacienda, es decir, que ya está pedido por el Gobierno a tres años vista (por la moratoria que le concede al club la ley). Si tenemos unos 10 millones de euros de deuda, que es la que entiendo yo que es real con el Gobierno, y al 25% de esos 5 millones, que son 1.250.000 euros, le sumamos el 25% de futuros traspasos, la deuda se puede pagar en siete años. Eso teniendo en cuenta que Osasuna, de una manera habitual, ha venido haciendo traspasos de una media de unos 2,5 millones de euros al año.

Explique por qué considera que la deuda de Osasuna con Hacienda es de unos 10 millones de euros y no de 20,6, como se dijo en su día.

-Lo explico. En su primer año de mandato, Izco pidió un préstamo de 18 millones de euros para pagar las deudas de Osasuna. Esos 18 millones de euros se los concedieron con un aval del Gobierno de Navarra y era un préstamo sindicado por medio de la Caja de Ahorros de Navarra, Banco de Vasconia y Bankinter. Es un préstamo que ahí está. Es decir, se trata de una deuda que Osasuna no está pagando al Gobierno, sino que está pagando a los bancos. Qué ocurre: que el Gobierno anterior dijo que son 10 millones de deuda con Hacienda que no cubre la tasación y otros 10 millones del préstamo de 18 millones que no se los debe el club al Gobierno, sino a la Caixa, al Banco Popular y a Bankinter, que es como se llaman ahora las entidades que en su día concedieron el préstamo. No soy yo el que lo dice, hasta Hacienda lo considera así.

Dice que, con el equipo en Segunda, Osasuna pagará la deuda con Hacienda en siete años. ¿Y si estuviera en Primera?

-En un año. El equipo de Primera que menos va a percibir por derechos de televisión se va a quedar con 40 millones de euros, y el 25% de 40 es 10. Sin embargo, también hay que contar que, si bajamos a Segunda B, no hablaríamos de esto. Así que de momento vamos a ser realistas, pero también positivos. Vamos a pensar que vamos a ir hacia arriba y nunca hacia abajo.

Con los problemas económicos del club, ¿les ha resultado complicado confeccionar la plantilla?

-Sí, porque con el aumento de los dineros de la televisión, mientras nosotros hemos tenido que solucionar algunos problemas, otros equipos han invertido en futbolistas y, lógicamente, han podido pagar más.

¿Siente que la actual junta está pagando la herencia de la mala gestión de las últimas directivas?

-Estamos pagando la estructura de un club que estaba sobredimensionada incluso para Primera División. Si en Primera se veía que se generaba déficit, en Segunda todavía más. Entiendo que no es muy normal que se haga una ficha a un futbolista en Primera y, si se baja a Segunda, se le baje solo el 20% de la ficha. El club en Primera percibía 30 millones por los derechos de televisión y en Segunda 2,6. Los ingresos no bajan un 20%, bajan un 90%. No me parece un acuerdo válido. Si un jugador gana un millón de euros, y había jugadores de Osasuna que lo ganaban, y en Segunda se rebaja el sueldo a 800.000 euros, eso es imposible que lo pueda soportar el presupuesto de un equipo de Segunda.

¿En cuánto han rebajado la masa salarial de la plantilla?

-Más o menos de unos 5 millones de euros a 3,2 o 3,3.

¿Era el objetivo que se marcaban?

-Sí, porque tampoco se puede hacer una plantilla solo con jugadores de Segunda División B.

El protagonista

Nombre. Luis Sabalza Iriarte. “Me llamo Luis porque así se llamaba mi abuelo”, revela.

Edad. 67 años (23/10/1947).

Nacimiento. Sangüesa.

Familia. Es el mayor de cinco hermanos y en la actualidad está separado. Tiene tres hijos (Luis, de 41 años; Pablo, de 39; y Ana, de 32) y un nieto, Daniel, que en octubre cumplirá 5 años. “Es el rey de la casa”, advierte.

Trayectoria profesional. Estudió durante seis años en el Seminario, pero a los 17 años comenzó a trabajar en Caja Navarra. Compatibilizó su oficio con sus estudios de Derecho en la UNED. Cuando se licenció, entró a formar parte de la asesoría jurídica de Caja Navarra y, después de que le prejubilaran, siguió trabajando como abogado en un despacho propio. Lleva temas de todo tipo, “menos laborales, porque no domino el tema”, dice. “Estoy solo, aunque colaboro con uno de mis hijos, que también tiene su despacho”, añade. “Tengo previsto jubilarme del todo cuando termine de ser presidente de Osasuna. Soy abogado porque me gusta y porque no quiero ser únicamente presidente de Osasuna”, explica.

14 años. Luis Sabalza es socio de Osasuna desde hace 35 años, de los que 14 los dedicó al puesto de defensor del socio.

8 Meses. El 10 de diciembre del año pasado tomó posesión de la presidencia de Osasuna.