Ante Budimir cumplió 34 años el pasado 22 de julio y, con un contrato hasta junio de 2027 —su cláusula de rescisión es de 20 millones de euros— Osasuna se asegura más o menos, porque nunca se sabe lo que puede pasar en el mercado, que la madurez plena de un delantero experto se siga traduciendo en goles, en puntos, en regalos para la afición y el club.
El delantero croata de Osasuna ha superado todas las barreras que hace no mucho se veían alejadas en el horizonte y, en su sexta temporada como rojillo, tiene el reto individual de seguir en la senda del gol y bendecir así el trabajo de sus compañeros.
Ante Budimir, colocado en la rampa de salida a principio de temporada por su rendimiento en LaLiga y el brillo en el campeonato al codearse con los goleadores más reputados –fue el tercero en discordia el pasado curso tras estrellas como Mbappé y Lewandowski–, vuelve a ser uno de los argumentos de peso para Osasuna en este nuevo curso. Por encima de las prestaciones del equipo y del rendimiento del grupo –aunque está claro que el ariete depende del suministro de sus compañeros–, las habilidades del goleador se despliegan en cualquier terreno y, lo mismo desatasca que da brillo. Budimir ha sido un buen desatascador de Osasuna en los partidos en los que se había hecho bolo, y también le ha dado lustre al trabajo del conjunto con tantos de bellísima factura o intervenciones decisivas frente a rivales peliagudos.
Un delantero de récord
El atacante croata ha sido el máximo goleador de Osasuna en cada una de las temporadas en las que ha lucido la zamarra rojilla. También ha superado a los máximos goleadores del conjunto navarro en Primera –Sabino Andonegui era el líder hasta la pasada Liga– y el curso pasado rebasó a Vergara como máximo realizador osasunista en una sola temporada en Primera, encaramándose a la importante cifra de 21 goles. También había desbancado al mítico Jan Urban —el delantero polaco es uno de los mejores futbolistas de la historia del club– como goleador extranjero con más dianas con Osasuna. Antes de fichar por el conjunto navarro, marcó 13 goles en la temporada 2019-20 con el Mallorca en Primera.
La importancia de Budimir es indudable, como también el respeto que se ha ganado en la Liga a base de goles y regularidad en esta peliaguda tarea. Cualquier equipo de primer nivel continental podría contar con el croata en su plantilla para codearse con los mejores del grupo y en ninguno de ellos desentonarían las cualidades del ariete rojillo.
Estadística brillante
Los 21 goles en la Liga pasada fueron su invasión del terreno reservado a los más grandes. Su tercer lugar en el ránking de goleadores del campeonato por detrás de Mbappé y Lewandowski le han dado un brillo todavía mayor a sus grandes registros. Que junto al fichaje estrella del Real Madrid y el histórico goleador polaco del Barcelona se sitúe el croata de Osasuna, da todavía más luz y brillo a sus grandes registros.
El indiscutible impacto de Budimir en Osasuna va más allá de lo deportivo porque su calidad humana, la cercanía con los aficionados y la inmersión en el día a día de Pamplona le dibujan un perfil entrañable que mejora también la consideración como jugador.