Osasuna afronta la última semana de competición del año sometido a presión en los dos partidos de los dos torneos que tiene por delante. El encuentro de Copa del miércoles en El Alcoraz frente al Huesca (19.00) determinará la clasificación o no para la siguiente eliminatoria, los octavos de final. Continuar en esta competición resulta interesante porque la Copa tiene un indudable atractivo para club y aficionados y, además, para el equipo contiene el plus de la actividad, de asaltar quizás la titularidad para la Liga a partir de un buen rendimiento en la competición copera. El Huesca es el primer rival de entidad con el que se va a medir Osasuna en este torneo y va a suponer una prueba exigente, algo más que el trámite que se afronta con los jugadores menos habituales. La siguiente ronda, los octavos de final, que siguen en el formato de eliminatorias a un solo partido en el campo del equipo de menor categoría –si no es así, el escenario del encuentro lo determina el orden de salida de los equipos en el sorteo–, se jugarán entre el 13 y el 15 de enero, con lo que la Copa queda aplazada unas semanas.
Cronológicamente, Osasuna tiene algo que decir el miércoles en la Copa ante el Huesca, pero donde se juega mucho más es el sábado en El Sadar en partido de Liga contra el Alavés. Los tres puntos en juego son fundamentales para la lucha por la permanencia en Primera, porque hay urgencia desde hace unas jornadas y necesidad por incrementar los números en la clasificación, en donde hay cada vez más equipos metidos en el turbio asunto de huir de la quema y con una diferencia de puntos minúscula. El objetivo de Osasuna es evidente, terminar 2025 con 18 puntos en 17 jornadas de Liga y para ello necesita computar los tres que se juegan con el conjunto vitoriano en un encuentro que ya ha adquirido la condición de vital.
El Athletic y el Girona
El siguiente encuentro del campeonato, el primero de 2026, es también en El Sadar, con el Athletic. Responder en estas dos jornadas consecutivas en casa puede ser sinónimo de recuperación. La primera vuelta terminará en el campo del Girona.
Por el momento, el ritmo de puntos por jornadas de Osasuna no es en absoluto satisfactorio y, lo principal y preocupante, es que en esta progresión no se asegura la permanencia y sí los problemas.
La importancia de los dos encuentros en estos cuatro días va a obligar a Lisci a manejar con tino los recursos de la plantilla. A su favor juega que tiene a casi todo el mundo listo, que el único lesionado es Iker Benito, aunque con la marcha de Boyomo a la Copa de África son necesarias alternativas para los dos compromisos.
La Copa. Osasuna se juega clasificarse para los octavos de final de la Copa en Huesca –el miércoles a las 19.00 horas–, frente al equipo local que entrena Jon Pérez Bolo.
La Liga. El encuentro en El Sadar con el Alavés es el último oficial de 2025. Los rojillos se juegan terminar la 17ª jornada con 18 puntos. Quedarán dos partidos más para terminar la primera vuelta, con Athletic y Girona.
