Tras ocho meses de conflicto laboral que han afectado al servicio de transporte urbano comarcal, la dirección de Moventis TCC, la empresa adjudicataria del servicio de villavesas, ha informado este lunes de que, tras la reunión mantenida este lunes con el comité de empresa, se ha alcanzado un principio de acuerdo que debe someterse a votación de la plantilla.

La mayoría del comité, compuesta por seis delegados de UGT y cuatro de CCOO, va a presentar esta propuesta a su afiliación para que decida si posteriormente se somete a votación de la plantilla. Tanto UGT como CCOO han tomado esta decisión por la situación de bloqueo en la que se encuentra el conflicto laboral. El resto de sindicatos, tres delegados de ELA, dos de LAB y dos de ATTU, han rechazado la propuesta de la empresa por considerarla insuficiente.

No habrá paros esta semana

Hasta que esta nueva situación no se resuelva, UGT y CCOO que componen mayoría ha adoptado la decisión de suspender los paros convocados para esta semana.

La compañía ha valorado “positivamente el paso dado en el marco del diálogo” y ha expresado su confianza en que este avance “permita poner fin a la actual situación de conflicto y retomar la normalidad en el servicio público de transporte urbano comarcal”. Las nuevas medidas que la empresa ha traído este lunes a la mesa de negociación son un quinto día de asuntos propios, ampliar el convenio hasta 2029 y mejorar los pluses nocturnos.

Según el comunicado de Moventis TCC, las medidas presentadas durante el proceso de mediación suponen “un gran acuerdo que mejora sustancialmente las condiciones de la plantilla”. Entre las principales mejoras destacan:

  • Incremento salarial vinculado al IPC general.
  • Abono de los atrasos desde la finalización del anterior convenio.
  • Aumento de los pluses festivo y nocturno.
  • Mejora de las prestaciones por contingencias comunes.
  • Vigencia del convenio hasta 2029.
  • Un cuarto día de asuntos propios en 2026 y un quinto día adicional en 2029, reduciendo la jornada anual a 1.658 horas.
  • Mejoras en los calendarios laborales que facilitan la conciliación familiar.

Con esta propuesta, el personal conductor de nueva contratación pasaría a percibir más de 36.000 euros anuales, con un salario medio de 40.000 euros y una jornada inferior a 37 horas semanales. Estas condiciones, subraya la empresa, suponen un 30% más que el convenio provincial del sector y una reducción de 100 horas anuales de trabajo.

Moventis TCC ha agradecido la “responsabilidad demostrada” por todas las partes implicadas y ha apelado al compromiso de la plantilla para que, mediante su voto, pueda ratificarse el acuerdo alcanzado y consolidar así el avance en las negociaciones.

En una nota emitida a la plantilla, el comité ha indicado que UGT y CCOO va a presentar el texto a su afiliación para luego decidir si la lleva a votación de la plantilla; y ELA, LAB y ATTU han convocado una asamblea general el jueves 9 de octubre en dos horas distintas: 10.00 y 17.00 horas.

Ocho meses de protestas

El conflicto estalló por la falta de acuerdo en la renovación del convenio, cuya vigencia había expirado en 2023, y durante este tiempo los trabajadores han llevado a cabo huelgas y paros parciales, afectando de manera significativa al servicio de transporte urbano comarcal de Pamplona. Los principales puntos de desacuerdo incluían el incremento salarial vinculado al IPC, mejoras en los pluses festivos y nocturnos, prestaciones por contingencias comunes, mejoras en las condiciones de trabajo y en la flota de autobuses, reducción de la jornada laboral y medidas de conciliación familiar.

Impacto del conflicto

La huelga comenzó el 2 de julio, afectando al servicio durante las festividades de San Fermín. El comité denunció la imposición de servicios mínimos "abusivos" y convocó manifestaciones para visibilizar su postura, invocando a la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona y al Gobierno a tomar cartas en el asunto. Durante la huelga, el servicio de las villavesas ha sufrido alteraciones significativas, incluyendo:

  • Retrasos y aglomeraciones en las paradas.
  • Pérdida de usuarios: se estima que se perdieron aproximadamente 15.000 usuarios semanales debido a la huelga.
  • Tensión social: la ciudadanía ha expresado repetidamente su malestar por las interrupciones en el servicio, mientras que los trabajadores han defendido sus derechos laborales.