Desde que el primer Gobierno socialista expropiara el holding de la abeja, Ruiz-Mateos, que personalizó los agravios sufridos por la firma en la figura de Boyer, protagonizó varias actuaciones estrambóticas con el objetivo de atraer la atención de los medios, entre ellas disfrazarse de Superman o de preso, persiguiendo al exministro de Economía, a quien incluso llegó agredir con su famosa frase "que te pego leche".

El episodio más mediático entre ambos tuvo lugar en 1989, a la salida de los juzgados, cuando Ruiz-Mateos le dio una colleja al ya exministro, que perdió las gafas. El rifirrafe posterior, unido a la famosa Frase: "Yo te pego, leche", se convirtió en todo un fenómeno entre el público.