La Cámara foral va a subir este 2023 las subvenciones que perciben los grupos parlamentarios y los sueldos que cobran los cargos electos. La Mesa y Junta del lunes abordará dos propuestas distintas para actualizar ambas cantidades. Los documentos plantean varios escenarios, desde que se queden congeladas hasta que suban un 2,5%. Pero existe un acuerdo para actualizarlas al alza, aunque no en la misma cantidad ni en los márgenes más altos: un 2% en el caso de las subvenciones y un 2,5% para las retribuciones. Será el órgano rector del Parlamento el que decida finalmente la cuantía, que supondrá la segunda subida consecutiva después de que las asignaciones estuvieran congeladas entre 2010 y 2021.
El primer documento, propuesto por la responsable de Intervención y Asuntos Económicos, parte de que para este año el Parlamento cuenta con 3.024.000 euros para las subvenciones a los grupos, lo que supone un 3% más que en 2022.
Con esta cantidad, dice la propuesta, se puede cubrir la “posible actualización de los importes” y las “modificaciones que se puedan producir en el arco parlamentario derivadas del proceso electoral”. Hay que tener en cuenta que los presupuestos son para todo el año y que justo a mitades hay unas elecciones forales. Ahora hay seis grupos en la Cámara: Navarra Suma, PSN, Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e I-E.
Será la Mesa, previa audiencia de la Junta, la que decida entre cinco opciones. Si las subvenciones se quedan como en 2022, significaría que cada grupo cobrará al mes un fijo de 8.253 € y unos variables en función del número de parlamentarios de 1.491 € por gastos de funcionamiento; 1.140 € por gastos de organización; y 4.256 € por cada cinco parlamentarios o fracción. Pero hay otras cuatro posibilidades: subirse un 1% –8.335 €, 1.506 €, 1.151 € y 4.297 €–; un 1,5% –8.376 €, 1.513 €, 1.157 €, 4.319 €–; un 2% –8.418 €, 1.520 €, 1.163 €, 4.340 €–; o un 2,5% –8.459 €, 1.528 €, 1.168 €, 4.361 €–.
Tres parlamentarios a dietas
Decidida también está la subida de retribuciones, que irá acorde a la de los funcionarios –2,5%– para 2023.
Esto significa que, en el caso de los parlamentarios rasos con dedicación absoluta –sin cargos en la Cámara ni la portavocía de sus grupos–, pasarían a cobrar 57.408 € al año. A partir de ahí, las retribuciones van subiendo en función de las responsabilidades –presencia en la Mesa, portavocía de grupo...– hasta el presidente del Parlamento, que en 2023 tiene aprobado un sueldo de 78.548 €. Ahora mismo, detalla la propuesta de retribuciones, hay solo tres parlamentarios –la socialista Patricia Fanlo y los regionalistas Iñaki Iriarte y Miguel Bujanda– que cobran por dietas de asistencia, hasta un máximo de dos por día. El detalle concreto está en la segunda tabla de esta información.
Se sube el kilometraje
Además de la subida del 2,5%, hay otra modificación al alza en un concepto muy concreto: el kilometraje. El Parlamento de Navarra ha decidido subirlo por primera vez desde 2020: ahora ya no serán de 0,32% céntimos por kilómetro, sino de 0,34%. La indemnización es mayor para aquellos parlamentarios con residencia a más de 25 km de Pamplona, y la Cámara también mantiene el acuerdo de pagar la misma cantidad tanto para los desplazamiento para asistir a sesiones parlamentarias como a reuniones del intergrupo.
En corto
3 % más que el año pasado. Para este año, el Parlamento de Navarra cuenta con 3.024.000 euros para las subvenciones a los grupos, lo que supone un 3% más que en 2022. Con esta cantidad, dice la propuesta, se puede cubrir la “posible actualización de los importes” y las “modificaciones que se puedan producir en el arco parlamentario derivadas del proceso electoral”. Ahora mismo, hay seis grupos –Navarra Suma, PSN, Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e I-E– en el Parlamento de Navarra.
