El consejero de Cohesión Territorial, Óscar Chivite, ha detallado este miércoles en la rueda de prensa posterior a la sesión que ha celebrado el Gobierno de Navarra, que el sobrecoste de la obra de duplicación de los túneles de Belate ascenderá a 7,6 millones de euros, pasando de los 67,8 millones presupuestados en un primer momento a más de 75,3 millones tras la revisión al alza, datos a los que habría que sumarle el IVA, por lo que el sobrecoste total será de 8,5 millones.
Según explicó Chivite, el Ejecutivo foral tramita el expediente del proyecto de modificado número uno de las obras, amparado en la Ley Foral de Contratos Públicos, y que responde tanto a causas imprevistas como a requerimientos externos. El objetivo, subrayó, es “mejorar la seguridad” en una de las actuaciones “más complejas” que se están ejecutando actualmente en Navarra.
En cuanto al estado actual de las obras, el consejero indicó que ya se han excavado más de 830 metros en la boca norte del túnel, y que también ha comenzado la excavación desde la boca sur. En total, se ha completado cerca del 20% de la actuación. Chivite admitió que el inicio de los trabajos “no fue fácil, y siguen sin serlo”, motivo por el cual defendió la necesidad de este modificado.
Entre los principales motivos del aumento del coste, el consejero citó tres factores fundamentales: por un lado, la morfología del terreno, menos favorable de lo que indicaban los sondeos previos al proyecto; en segundo lugar, la mayor cantidad de agua que emerge de la montaña; y, por último, los requerimientos técnicos impuestos por organismos externos, como el Departamento de Industria del Gobierno de Navarra y las Confederaciones Hidrográficas del Ebro y del Cantábrico.
El 18 de marzo de 2024, dentro de los trámites previstos para la ejecución de las obras, la UTE adjudicataria solicitó la autorización para realizar voladuras, entregando el proyecto ante la Delegación del Gobierno en Navarra, que a su vez solicitó informe al Departamento de Industria. Como resultado, se han aplicado medidas técnicas que, según Chivite, permiten aumentar la seguridad, prevenir afecciones medioambientales en las cuencas del Bidasoa y del Ultzama y garantizar una mayor estabilidad estructural en la obra.
El modificado afecta a 14 conceptos del proyecto, con una reducción del presupuesto en tres de ellos: los desmontes dos y tres, y el capítulo de revestimiento, aceras y rellenos. En los restantes, los aumentos no superan el 5,7% respecto al presupuesto original.
Entre los capítulos más significativos, el coste de la excavación del túnel pasa de 25 a 26 millones de euros, un aumento del 1,54 % (1.042.000 euros). Aunque se mantiene el uso de voladuras y medios mecánicos, se ajusta la técnica a requerimientos del Departamento de Industria, que exigen medidas más estrictas de seguridad en función del tipo de roca encontrado.
El sostenimiento del túnel se incrementa en un 5,7% hasta los 4 millones de euros adicionales. Se refuerzan las estructuras internas, las cerchas, aumentando su peso de 14 a 43 kilos por metro lineal, a propuesta de la Dirección General de Energía.
Y en depuradoras, el aumento es del 2,4%, lo que supone 1,6 millones de euros más. Se pasa de proyectar depuradoras con una capacidad de 8 litros por segundo a otras de 40 litros por segundo, para adaptarse al volumen de agua que emana del terreno y cumplir con los requisitos medioambientales exigidos por las Confederaciones Hidrográficas.
Chivite señaló que todas estas modificaciones han sido consensuadas entre la dirección facultativa externa, la UTE constructora (Acciona, Osés y Servinabar) y el departamento de Obras Públicas, que supervisa los trabajos. Recalcó que las decisiones adoptadas han demostrado ser acertadas tras los primeros metros excavados, ya que las comprobaciones de estabilidad han dado “muy buenos resultados”.
Para finalizar, el consejero insistió en que se trata de una actuación ajustada a derecho: “Este modificado del proyecto está conforme a la ley, cumple con todas las garantías legales y económicas, y sigue el proceso de tramitación habitual”, afirmó. Reiteró que responde a “causas sobrevenidas y requerimientos externos”, garantiza “una mayor seguridad en la obra” y evita “afecciones medioambientales” en las zonas de influencia del proyecto.
Sobrecoste del 35% en las primeras obras de Belate
Hay que recordar que las obras del primer túnel de Belate tuvieron un sobrecoste del 35% y una ampliación en el tiempo de ejecución de la obra de más de año y medio, según certificó la Cámara de Comptos en octubre de 1998. Se trata de unas obras que comenzaron a adjudicarse en 1993 y fueron inauguradas cuatro años más tarde.
El informe cifra en 4.215 millones de pesetas (25.3 millones de euros) los pagos por el Túnel de Belate cuando el presupuesto de adjudicación fue de 2.872 millones de pesetas (17.2 millones de euros). En el caso del tramo III, la obra fue adjudicada en 1.300 millones de pesetas y los pagos del Gobierno de Navarra superaron esa cifra en mil millones.
Los datos aportados por la Cámara de Comptos muestran que las adjudicaciones de las obras, realizadas por concurso a la oferta económicamente más ventajosa, bajan el presupuesto de licitación alrededor del 25 por ciento. Sin embargo, las modificaciones en los contratos y otras incidencias en la ejecución de los contratos hicieron que el presupuesto final sea en el conjunto de la obra un 35 por ciento mayor que el adjudicado.