Dicen sus amigos que Fernando Beltrán García, valenciano de 34 años, está "curado de espanto". Fue novillero durante 10 años y le ha pasado prácticamente de todo lo que le puede pasar a un enamorado del toro que corrió su primer encierro de San Fermín con 15 años. Ahora tiene que sumar una buena paliza que le ha dado la torada de Fuente Ymbro en el encierro de hoy.

Beltrán ha sido uno de los seis traslados desde el recorrido al Hospital Universitario de Navarra. En principio con un traumatismo de pronóstico reservado, pero le han dado el alta pasadas las doce y media.

Le han hecho placas, análisis de sangre y orina y una ecografía para descartar afecciones a los órganos. Tiene una buena paliza encima, pero solo eso.

Para cuando le han dado el alta ya tiene el vídeo exacto del momento de la caída, y 48 chats sin responder en el teléfono. Le han pasado las imágenes por todos lados y ahora responde a la gente para tranquilizarla. Beltrán llevaba una carrera buenísima delante de dos toros al paso de Estafeta con Telefónica, justo donde la antigua tienda de Kukuxumusu. Cae y le pisan.

Ha venido con varios amigos del toro para pasar la semana y correr todos los días. "A ver cómo me levanto mañana, pero tengo que estar muerto para no ir al encierro", ha dicho, mientras caminaba con algo de dificultad por la puerta de urgencias.