PAMPLONA. La sentencia considera probado que la noche de los hechos, sobre las 4.25 horas del 9 de diciembre de 2012, el acusado se encontraba esperando un taxi en la parada de la calle Duque de Ahumada de Pamplona y que al llegar uno, se dirigió hacia él para montarse.
En ese momento, relata la juez, se acercó un hombre que le dijo al condenado que él estaba esperando el taxi, ya que había llamado al servicio de tele-taxi. Así, se inició entre ellos "una discusión verbal, encarándose ambos".
La juez añade que el acusado, que ha estado federado en la Delegación Navarra de Federación española de Judo y deportes asociados en la disciplina de aikido, "con ánimo de atentar contra la integridad física" del otro hombre, "se encorvó y, haciendo una llave propia del aikido de proyección, le empujó y lo tiró al suelo". La víctima quedó "tendido en el suelo inconsciente", según la sentencia.
Como consecuencia de este hecho, el hombre sufrió lesiones que precisaron de tratamiento médico quirúrgico, medicación, terapia rehabilitadora, revisiones de traumatología y neurocirugía. Además, le han quedado varias secuelas.
Las lesiones tardaron en sanar 159 días. Durante los tres primeros días estuvo hospitalizado en el Servicio de Traumatología del Complejo Hospitalario de Navarra y durante los restantes 156 días estuvo incapacitado para la realización de sus tareas habituales.