pamplona - Las mujeres recluidas en la nueva prisión de Pamplona no pueden tener a sus hijos e hijas consigo porque el módulo femenino no lo permite. Instituciones Penitenciarias solo tiene instalaciones adecuadas para que las mujeres presas puedan criar a sus bebés en Madrid, Picasent (Valencia) y Sevilla, por ello las reclusas de Pamplona o bien tienen que salir de la capital navarra si quieren estar con sus hijos e hijas o prescindir de ellos y dejarlos en manos ajenas. Según denunciaron ayer las profesoras de Derecho Penal de la UPNA Paz Francés Lecumberri y Soledad Barber Burusco, Instituciones Penitenciarias ha recortado otros recursos y ha cerrado pisos tutelados, una alternativa más adecuada para las mujeres, madres de bebés, condenadas a prisión que solo hay en Madrid.
Estas y otras circunstancias que condicionan la vida de las mujeres presas serán abordadas en las XI Jornadas de Estudios Penitenciarios de la UPNA que se celebran los días 21 y 22 de abril y que han sido organizadas por la Facultad de Ciencias Jurídicas de la UPNA y la Asociación Salhaketa. Estas XI Jornadas de Estudios Penitenciarios se dedicarán de forma monográfica a la situación de la mujer en las cárceles. El encuentro tendrá lugar en la Sala Ada Byron del edificio Las Encinas y se completa con una muestra de fotos en el Aulario del 20 al 30 de abril.
Las jornadas, presentadas por dichas profesoras, Soledad Barber y Paz Francés, también integrante de Salhaketa, son abiertas al público y sólo es necesario inscribirse para obtener el certificado de asistencia. Siete mujeres especialistas en este tema analizarán en las jornadas el recorrido histórico del encierro femenino; la situación de las mujeres en prisión, con especial referencia a la cárcel de Pamplona; las relaciones de pareja de las mujeres encarceladas; o la condena compartida que supone la presencia de mujeres acompañadas por sus hijos de corta edad. Paz Francés recordó que los menores pueden estar en prisión hasta la edad de 3 años y en referencia a la cárcel de Pamplona dijo que las mujeres, unas 25 (19 más las de tercer grado), están ubicadas en un módulo de respeto, “cuya organización es más dura” y condiciona el cumplimiento de sus condenas.
Destacaron que el encierro femenino ha sido prácticamente olvidado durante siglos y todavía hoy son muchas las cuestiones que se deben abordar. Históricamente, las mujeres han sufrido todo tipo de encierros determinados por su género y no fue hasta 2008 cuando se redactó el primer “Programa de acciones para la igualdad entre mujeres y hombres en el ámbito penitenciario” y se pensó en el encierro desde la perspectiva de género. Este programa, denunció Paz Francés, no se ha desarrollado por el Gobierno del PP, “que lo tiene en un cajón”. Hoy solo tres centros están dedicados exclusivamente a mujeres. Se trata de Alcalá de Guadaíra (Andalucía), Madrid I- Alcalá (Madrid) y Centre Penitenciari de Dones de Barcelona. Sin embargo, casi todos tienen un módulo de mujeres. “Módulos de mujeres dentro de grandes macrocárceles para hombres -con muchos más módulos- que condicionan y determinan organización, actividades, o recursos”, como es el caso de Pamplona, dijeron las ponentes. Cuando se construyó la macrocárcel de Pamplona se pensó en dos módulos destinados a albergar a cientos de mujeres y la realidad es que uno está cerrado y el otro no alcanza el 30% de su ocupación.
programa
Martes 21 abril (17 a 19.30). Charla: Mujeres presas ayer y hoy, de Paz Francés Lecumberri; proyección de La mochila invisible con participación de las protagonistas: Katia Reimberg, Castello Brcnco, Rosivan Cirino de Souza, Teresa Valencia Posada y la directora del documental, Laura Hernández.
Miércoles 22 abril (17 a 19.30). Charla: Una condena compartida. Madres encarceladas con hijas/os, de Mª José Gea (Asociación GSIA (Grupo de sociología de la infancia y la adolescencia); charla: Amor en prisión. Relaciones de pareja de las mujeres encarceladas, de la socióloga Estíbaliz de Miguel.