- "Entendemos que hay una contradicción (en la respuesta a la pregunta 8, que se considera probado que todos fueron a Cáseda conscientes de que llevaban el arma cargada para ser usada) que se ha puesto de manifiesto por el magistrado que preside el jurado y la explicación que ha dado el tribunal no salva esa contradicción. Es decir, no se puede afirmar eso sobre Juan Carlos hijo en los hechos probados y que de ahí no se derive ningún tipo de responsabilidad, tenía que haber sido condenado. Eso crea una contradicción que tendremos que hacer valer en los recursos correspondientes". El abogado de la acusación particular ejercida por la familia de las víctimas del triple crimen de Cáseda, Ignacio Rodríguez, anunció su intención de recurrir la absolución al considerar que existe una contradicción entre los hechos probados por el jurado y su veredicto final.

En su veredicto, el jurado consideró probado por unanimidad que los tres "conocían de la presencia en el vehículo de las dos escopetas y la munición, las llevaban con el objetivo de utilizarlas para el caso de que fuera necesario en el curso del enfrentamiento que iban a mantener con Julián José y su familia". A juicio del abogado, "si se entiende que eran conocedores de que el coche estaba cargado de armas y que habían acordado que en su momento, si era necesario, utilizarían las mismas, eso afecta a las tres personas que ocupaban el vehículo y, por tanto, Juan Carlos hijo tenía que haber sido condenado también", explicó.

La familia Jiménez Echeverría, a la que representa el letrado, ha vivido este proceso "con esperanza, ansiedad y mucho dolor porque es revivir una y otra vez lo que ha pasado" y anunció que "el veredicto dictado no les va a satisfacer de manera completa" porque ellos "entienden que las tres personas debían responder de los hechos sucedidos" y así lo han defendido durante todo el proceso. Respecto al papel del jurado, ha reconocido que se trata de un caso "complejo" en el que "la participación o no de los hijos era una cuestión crucial".