Los Reyes Magos ya lo tienen todo preparado para sorprender a los niños y niñas la mañana de este viernes. Como de costumbre, las cartas a Sus Majestades tienen indicaciones de regalar toda clase de juguetes: muñecas, peluches, coches, juegos de mesa... Pero sobre todos ellos destaca uno en especial que, además, ya debutó a finales de los años 90. Se trata del conocido Tamagotchi, una mascota virtual que llama la atención de los pequeños de la casa.

Con su hija, una pareja busca juguetes.

Agotado en el Corte Inglés desde hace días, el Tamagotchi ha sido reeditado este año por sus creadores. “No nos queda ni uno. Es, sin duda, el juguete estrella de este año”, comenta con asombro Nacho Buhigas, responsable de la juguetería del establecimiento en la calle de Estella. Con 25 años de historia, este juguete tecnológico vuelve a arrasar en el mercado y se convierte en el producto más vendido de cara al día de Reyes.

Una madre contempla muñecas junto a su hija pequeña en la juguetería del Lecrerc.

Al parecer, la tecnología será la gran protagonista en los juguetes de 2023. Así lo explica Buhigas, quien añade que “las videoconsolas vinieron para quedarse, los niños se entusiasman y pueden pasarse horas jugando”. Así, dispositivos como la Play Station o la Nintendo Switch se convierten en los predilectos, especialmente de niños cuya edad oscila alrededor de los nueve años. Entre los juegos preferidos para disfrutar de estas consolas, “se venden muy bien los Pokemons, el Minecraft y todas las versiones de Súper Mario”, indica Buhigas.

Los clásicos resisten

Los juegos de mesa nunca pasan de moda, y por ese motivo “la gente sigue pidiendo el Monopoly, el Trivial o el Scattergories”, señala Cristina Benítez, responsable de la juguetería del hipermercado Lecrec, situado junto al centro comercial La Morea.

“No nos queda ni un Tamagotchi. Sin duda, es el juguete estrella de este año”

Nacho Buhigas - Responsable de la juguetería Corte Inglés

David de Gracia, padre de dos hijos, de seis y once años, confirma que “los juegos de mesa siempre serán un clásico”, y por eso se encontraba ayer en la zona de juguetes del Lecrerc, buscando un entretenimiento que “divierta y eduque” a sus críos. Asimismo, Lourdes Moneo, junto a su marido Ricardo, exploraba las estanterías en busca de juegos de mesa para sorprender a sus sobrinos pequeños.

Por otro lado, las muñecas y los bebés también son juguetes tradicionales que siguen siendo demandados. “Los muñecos Reborn se están pidiendo muchísimo, teníamos el almacén lleno y ya no quedan”, manifiesta el responsable de la juguetería del Corte Inglés. De igual manera, los LEGO, conocidos bloques de construcción, se han agotado rápidamente. “A los niños les encantan”, concluye Buhigas.

“Los juegos de mesa nunca pasan de moda, se siguen demandando el Monopoly o el Trivial” cristina benítez

Cristina Benítez - Responsable de la juguetería del Lecrerc

Novedades

Cristina Benítez explica que “ahora, a partir de los nueve años, algunos niños dejan de jugar con juguetes y se lanzan a por las manualidades. Muchos padres vienen preguntando por productos creativos”.

Para los preescolares, los grandes elegidos son todos los juguetes derivados de la serie de dibujos animados Bluey. Protagonizados por una familia de perros, los episodios pueden encontrarse en Disney Plus y Youtube. También La casa de muñecas de Gabby, cuyos capítulos están en Netflix, arrasa estas Navidades con los productos basados en su serie.

Estereotipos de género

Las épocas cambian y los juguetes también. Las niñas ya no piden solamente princesas, ni los niños superhéroes. El rosa y el azul ya no son colores fronterizos o divisorios, sino que ahora, para educar en igualdad, se complementan. “Los padres ya no van en busca del clásico ‘una princesa para la niña y un coche de carreras para el niño’, sino que ahora barajan otras opciones, aunque sí que sigue habiendo gente que continúa con estereotipos”, puntualiza la encargada de la juguetería del Hipermercado Lecrerc. Nacho Buhigas concuerda con Benítez, aunque detalla que “el sexismo sigue existiendo, pero cada vez es menor”.

Sara Sánchez, madre de una niña y un niño de tres y cinco años respectivamente, explicó que la mayor ilusión de su hija Paula es tener un dinosaurio de juguete. “No me pide muñecas, ella prefiere los dinosaurios, y además los comparte con su hermano”, señaló Sánchez.

Por otro lado, Jennifer Goñi comentó que a su niño de tres años le iba a comprar un coche, y a su niña, de la misma edad, otro, aunque este con una Barbie incluida. “Cuando vayan creciendo irán pidiendo más cosas, espero que no se pasen”, rió Goñi. Y es que la subida de precios es algo preocupante para la población navarra. “En Reyes, mis hijos piden tres o cuatro cosas y mi esposa y yo nos decantamos por una”, aclara David de Gracia. Además, demostrando que los roles de género van poco a poco desdibujándose, de Gracia expresó que su hija, de once años, “juega al fútbol y por Reyes ha pedido un balón”.

Otros padres, como Ricardo Bruno, optan por no adentrarse en el mundo del rosa y el azul y, en su lugar, se inclinan por juguetes instructivos y creativos, como un teatro de marionetas. “Es importante que puedan desarrollar su imaginación”, destaca Bruno.

Así, a pesar de que el sexismo siga existiendo, las familias cada día son más conscientes de que los productos no deberían tener género, y que cada niño o niña puede jugar con el juguete que más le guste.