Andrés Urrutia, presidente de Euskaltzaindia, considera que el descubrimiento de la Mano de Irulegi ayuda a fomentar el euskera en el día a día. Además, se convierte en un elemento más a añadir a la presencia histórica en el territorio del euskera, que es parte esencial en la historia de Navarra.

“Como cualquier otro hallazgo en torno al euskera, genera una serie de hipótesis que habrá que confirmar tras las correspondientes investigaciones interdisciplinares, investigaciones que se han de realizar de acuerdo con los parámetros científicos e históricos actuales y que, evidentemente, llevarán tiempo. Euskaltzaindia seguirá estas investigaciones con gran interés”, asegura.

“En todo caso, se trata de una noticia que demuestra que el arraigo social del euskera va en aumento y que esta sociedad es sensible a este tipo de hallazgos en cuanto que coadyuvan a una mayor presencia del euskera en el contexto de la convivencia diaria y la personalidad e identidad de este país. Es precisamente este arraigo social el que Euskaltzaindia promueve y difunde en todos los territorios de lengua vasca, poniendo en valor las realidades históricas y las circunstancias actuales de la lengua vasca”.

Que el euskera sea parte esencial de la historia de Navarra es algo evidente y que, a estas alturas, no necesita prueba alguna. Este hallazgo, de confirmarse las hipótesis, es un elemento más a añadir a la presencia histórica en el territorio de lo que hoy conocemos como Navarra de personas que utilizaban una lengua del tipo que se lee en la mano y que puede estar emparentada con la lengua vasca, salvando las distancias de tiempo entre ambas realidades”, concluye.