Navarra ha activado un total de 312 códigos suicidios desde que se puso en funcionamiento esta herramienta a finales de 2022 y hasta finales de 2023. Así lo detalló ayer en el Parlamento de Navarra el consejero de Salud, Fernando Domínguez, que valoró este procedimiento como un “hito” en la prevención del suicidio. Se trata de, explicó el consejero, de un procedimiento de atención clínica que da respuesta “de forma coordinada, rápida y eficiente” a las personas con ideación y/o conducta suicida, cuando una vez valorado, el clínico considera activarlo. “Desde cualquier ámbito, profesionales de psiquiatría y psicología clínica, pueden activar o desactivar el Código Suicidio desde la Historia Clínica, en función del riesgo y de la evolución del mismo”, expuso.

Preguntado sobre las medidas para prevenir conductas suicidas en jóvenes, Domínguez destacó que en el periodo de 2023 “no ha habido personas fallecidas por suicidio y lesiones autoinflingidas por debajo de los 29 años”. “Esa es la mejor noticia y nuestro máximo objetivo a mantener siempre. Pero la prevención de los trastornos mentales es responsabilidad de todos los ámbitos de la administración y de la sociedad”, sostuvo.

En este sentido, señaló algunas de las medidas que Salud tiene en marcha en este ámbito como el Protocolo de colaboración interinstitucional de prevención del suicidio, “referente en todo el estado” o el Plan de atención a las personas con conductas suicidas, “vigente en todo el sistema y a disposición de cualquier profesional en Auzolan (la intranet de Osasunbidea)”.