Florencio Roselló, arzobispo de Pamplona y Tudela, hizo balance en una rueda de prensa este viernes del primer año de su mandato en el arzobispado. Roselló comenzó su intervención recordando al Papa Francisco, que en estos momentos se encuentra en una situación complicada de salud. Asimismo, durante su intervención, respasó parte de los hitos y avances que ha conseguido la iglesia en este año y un mes de mandato.

En cuanto a su primer aniversario, Roselló ha dicho que ha sido un "año intenso, bonito, no exento de situaciones delicadas y complicadas". Y ha valorado que su antecesor, Francisco Pérez, "me dejó una diócesis serena y tranquila" que "va caminando".

Un año, ha destacado, que le ha permitido "entrar en contacto con mucha gente" e "ir conociendo" la Comunidad foral. Ha llamado la atención ante la falta de sacerdotes en Navarra y ha destacado que "necesitamos vocaciones". Ha expresado su "gratitud y estima" por su trabajo "porque se tienen que multiplicar, se juegan la vida a veces en la carretera" para llegar a los pueblos. "La iglesia no puede ir adelante sin vuestro compromiso y servicio", ha remarcado.

Por otro lado, ha resaltado que "la Iglesia está formada fundamentalmente por laicos" y así lo ha querido reflejar en sus nombramientos. También se ha mostrado preocupado por la "transmisión de la fe" y ha anunciado la creación de un "equipo especial que elaborará un programa de catequesis": "Queremos hacer llegar el mensaje del evangelio con la mentalidad de hoy".

El primer año de Roselló está marcado también por el "Jubileo de la esperanza" decretado por el Papa Francisco para demostrar que "es posible ser feliz, vivir con ilusión y alegría cada uno con lo que cree". La diócesis en Navarra ha organizado "bastantes actos" al respecto con "mucha gente" que se están acercando a las catedrales de Pamplona y Tudela para "ganar el jubileo". También ha recordado que ha designado cuatro "espacios de llaga" como jubilares: la Clínica Padre Menni en Elizondo; el Hospital Reina Sofía en Tudela; la Casa de Misericordia y el centro penitenciario de Pamplona. 

El arzobispo de Pamplona y Tudela, Florencio Roselló. Unai Beroiz

Roselló resaltó el creciente papel de la mujer en la Iglesia, con un aumento considerable de las mujeres partícipes en la labor del arzobispado. El arzobispo transmitió su preocupación por la transmisión de fe, que "los nuevos tiempos" han generado que "se necesiten nuevas vías y canales en pos de difundir la fe cristiana".

Los abusos, reparación e indemnización

Florencio Roselló mostró su voluntad de "iniciar ya" la "reparación" de las víctimas de abusos en el seno de la Iglesia en Navarra, contemplando indemnizaciones económicas. Una medida con la que "en principio están de acuerdo" las dos asociaciones de víctimas y el Gobierno de Navarra. Aunque no se atrevía a dar una cifra aproximada del dinero que se dispondrá para cubrir estas reparaciones, el arzobispo aseguró que serán fondos de la Iglesia.

Roselló admitió que este fue un "tema que me encontré" al llegar a la diócesis en Navarra y destacó que "he condenado estos abusos durante todo el año en varias homilías" porque "es algo que vivo con gran preocupación".

Apuntó que se ha encontrado "con un camino ya trabajado, no exento de polémica"e indicó que, a lo largo de su primer año, ha celebrado varias reuniones con las asociaciones de víctimas en la Comunidad foral y con representantes del Gobierno de Navarra. Y ha puesto en valor que la Iglesia navarra se ha incorporado "como un elemento más" a la comisión del Ejecutivo foral que estudia estos casos.

El arzobispo de Pamplona y Tudela, Florencio Roselló. Unai Beroiz

En este sentido, resaltó que "queremos iniciar ya el tema de la reparación e indemnización" de las víctimas de abusos "a nivel psicológico, pastoral, moral y económico". Una medida que ya ha anunciado al Gobierno de Navarra. Según explicó, la diócesis navarra enviará a la comisión de la Conferencia Episcopal los expedientes de "las víctimas que pidan esa indemnización".

Roselló consideró que, a pesar de que "son casos todos prescritos", "tenemos un compromiso moral de asumirlo". Según relató, las indemnizaciones saldrían de los "fondos de la iglesia". En los casos de abusos de sacerdotes "lo repararía el Arzobispado" y, en los casos de congregaciones religiosas, "tendrán que repararlo ellos". Con respecto a la cuantía de estas indemnizaciones, el criterio será el que "correspondería según el derecho penal", siguiendo "baremos de alguna conferencia episcopal europea" y con la ayuda de la comisión de la Conferencia Episcopal.

“Es una noticia positiva y esperanzadora”

Marcos Leyún, presidente de la Asociación de Víctimas de Pederastia en Instituciones Religiosas de Navarra, valoró la noticia del proceso como “positiva y esperanzadora para las víctimas”. “La pasada semana, el lunes, nos reunimos con el arzobispo y nos pidió perdón por los casos de abusos y reconoció lo ocurrido; se trata de la primera vez que esto ocurre en todo el país”, aseguró el presidente. “Esto es un cambio, la comisión de Conferencia Episcopal Española tiene mucho que ver en esto”, recalcó. 

“Sin embargo, Roselló matizó que las víctimas de abusos que se cometieron en instituciones religiosas deberían ser sufragadas por el mismo centro, y no estamos de acuerdo. Defendemos que es la Iglesia la que debe hacerse cargo en su totalidad de todo el reconocimiento a las víctimas, en este caso, de las indemnizaciones y la reparación de la salud mental”, relató. “Nosotros nos comprometemos a reunir todos los testimonios de las personas que sufrieron abusos en las instituciones para colaborar en este proceso y hacerlo efectivo cuanto antes”, afirmó. 

 Jesús Zudaire, víctima de abusos en el colegio Puy de Estella, “confía” en el trabajo y palabra del arzobispo

Jesús Zudaire, presidente de la Asociación de Víctimas de Abusos a menores en el seno de la Iglesia, asgueró que la noticia es “positiva” pero que hay que “esperar a que pasen los días. 

Zudaire mantuvo una reunión con el arzobispo hace unos días en la que Roselló le aseguró que recibirían una indemnización todos los alumnos del Puy de Estella, colegio donde ocurrieron varios abusos a menores. De esta manera, son 9 las personas (los integrantes de esta asociación) quienes recibirán la indemnización, que todavía no saben cuál será la cantidad. “El arzobispo me dijo que en 3 o 4 meses recibiremos el dinero de la indemnización, pero no sabemos cuánto es”, afirma. “Este proceso solo va a beneficiar a las víctimas de instituciones que en su momento manejaba la Diócesis, lo que deja muchas de las víctimas fuera”, añade.

“Nosotros confiamos en Rosellón, nos ha dicho que está con nosotros y creo que va a cumplir con su palabra”, vaticina. “Nunca antes había pasado esto en el Estado, así que es algo pionero que llevábamos pidiendo mucho tiempo”, señala.