El Hospital Universitario de Navarra (HUN) mantiene su actividad de forma parcial tras el apagón eléctrico que afecta a varios países europeos. Durante algo más de un cuarto de hora, según han asegurado varios trabajadores, al menos algunos servicios del complejo hospitalario se han quedado sin corriente eléctrica hasta que se han activado los grupos electrógenos (generadores de electricidad) y la actividad se ha podido restablecer parcialmente.
No obstante, las intervenciones quirúrgicas no urgentes se han suspendido y, según ha destacado el consejero de Salud, Fernando Domínguez, "las operaciones que estaban ya iniciadas se han podido concluir sin incidencias". Por su parte, las consultas se mantienen, aunque la actividad está siendo muy baja, entre otras cuestiones porque muchos pacientes no han acudido a la cita.
Ahorro de energía
En estos momentos en todo el HUN se escucha un fuerte zumbido provocado por el funcionamiento de los generadores, que se están recargando con gasoil para mantener su autonomía. Aún así, "se está intentando ahorrar el máximo posible de energía", ha señalado el consejero, y servicios como los de Personal o algunos puestos de Administración han apagado sus ordenadores y equipos informáticos para reservar electricidad. También el servicio de comidas, ha indicado Domínguez, "está garantizado".
En el centro de consultas de Príncipe de Viana las salas de espera se encontraban sin luz y prácticamente vacías y en el Servicio de Urgencias se ha registrado una alta actividad, propia de los lunes, pero la atención se ha mantenido "con cierta normalidad".
"Todos los puntos críticos están funcionando"
A las puertas del Hospital de Navarra del HUN, el consejero Domínguez ha atendido a los medios de comunicación y ha querido transmitir "un mensaje de tranquilidad". "Todos los puntos críticos del hospital están funcionando y las intervenciones que estaban en marcha se han terminado gracias a que han entrado en funcionamiento los grupos electrógenos, igual que en la UCI", ha indicado.
En lo relativo a las consultas, ha apuntado que "están funcionando como se puede porque no hay ordenadores y entonces no se puede acceder a la Historia Clínica".
"Los quirófanos, hasta que no haya certeza absoluta de suministro estable, no se van a usar", ha señalado Domínguez, que ha matizado que en el caso de un paciente grave "hay posibilidades de intervenir con grupos electrógenos o con lamparas con baterías. Ante un caso grave, se saca el trabajo seguro".