- El director general de Salud, Carlos Artundo, que ya se ha reincorporado a su cometido tras superar el coronavirus, dijo ayer que el Gobierno foral está preparando una estrategia de desescalada “lo más prudente posible” y “asimétrica” dentro de Navarra, teniendo en cuenta que no es igual la situación de pequeñas poblaciones que la de las ciudades. Añadió que “todos tenemos muchísimas ganas de salir, pero es importante tener prudencia, absolutamente exigible en esta nueva fase”.

Así pidió que “lo que hagamos lo hagamos poco a poco, con cabeza y con muchísima prudencia”. “No podemos volver atrás y tirar por la borda la cantidad de esfuerzo, todo lo que ha hecho la sociedad, todo lo que han hecho los profesionales, lo que ha hecho el conjunto de la comunidad, una lección de ciudadanía que nos ha dado la gente. Eso no lo podemos poner en peligro y hay que introducir las medidas de corrección cuando sea necesario”.

El director de Salud afirmó que la fase de desescalada es “incluso más compleja” que el proceso vivido hasta ahora. “Hay que hacer un balance entre la recuperación de la actividad asistencial tanto en los centros de Primaria como en los hospitales y la necesidad de mantener algunas capacidades estratégicas para responder lo más rápidamente posible si se objetiva un rebrote del virus”.

Del mismo modo, señaló que “también hay que hacer un balance entre la protección de la salud pública y la minimización del impacto económico y social que todas las medidas de confinamiento tienen”.

Carlos Artundo afirmó que en este proceso “acertaremos más y nos equivocaremos menos si vamos de la mano de la evidencia científica, de los que saben más, de los profesionales, de los expertos, y también sobre todo si tenemos un sistema de información y monitorización que nos permita predecir, anticiparnos y adaptarnos ante las situaciones que se van a ir produciendo”.

Señaló que el Gobierno foral está “construyendo y planificando una estrategia lo más prudente y seria posible en Navarra, que será en el marco de la estrategia global del Estado y también coordinando y aprendiendo mutuamente con otras CCAA y por supuesto a la vista de las experiencias que hay a nivel internacional”. Afirmó que esa estrategia deberá tener en cuenta “la asimetría foral”. “No pueden ser las medidas las mismas en algunas cosas en Ustarroz, en Garde o en Pamplona. Tendremos que trabajar inteligentemente muy de acuerdo con los ayuntamientos”.

Además, señaló que “tenemos que trabajar desde una lógica interdepartamental e intersectorial”. “Esto no afecta solamente al Departamento de Salud, afecta a todos los departamentos y todos los sectores para organizar y gestionar unas medidas de transición lo mejor posible, aprendiendo de la primera fase, utilizando todo el talento, la imaginación, la creatividad de la sociedad civil de Navarra, que ha sido tremendamente importante en esta fase”.