- La historia de Leoncio no hubiera sido posible contarla sin el testimonio de Paulina Lizoain Pascal, natural de Urdániz y vecina de Larrasoaña de 89 años que presenció aquel entierro de cuatro fusilados y cuya memoria sirvió para encontrar sus restos. En un vídeo difundido por el Gobierno foral, Paulina Lizoain recuerda lo que ocurrió aquel día y ofrece apreciaciones valiosas de lo que fue una época horrible. "Cuando salimos de la escuela, recuerdo que nos dijeron que habían matado a cuatro de los fugados del Fuerte en el cementerio de Larrasoaña. Vinimos dos chicas rápido hasta aquí", cuenta Paulina, mientras contempla la exhumación de los huesos que eran esqueleto de aquellos cuerpos. "De hecho, la otra chica que vino conmigo no se si vive aún. Entonces los estaban enterrando, pero yo los vi entericos. Dos quedaron boca abajo y otros dos quedaron boca arriba, dos rezaron y otros dos no. Era mayo de 1938 (la fuga se fija el 22 de mayo). Estaba mi padre (Florentino) enterrándolos con otros hombre del pueblo, y yo con mi padre no hablé nada. Ahora he sentido pena, como la que sentí entonces", decía en el momento en el que se exhumaron los cuerpos en julio de 2018 y estando ella presente en el acto.

"No hay derecho a matar a la gente así. Una gente que se entrega de esa manera, ¿por qué hay que pegarles dos tiros? ¿Te parece que eso es normal?", se pregunta Paulina en el vídeo difundido ahora por el Gobierno foral. "Me parece muy bien que se haga esto, porque si se les identifica pueden tener familiares, llevar sus restos y enterrarles donde quieran ellos. Porque sus familias no sabrán dónde están y todo el mundo tiene derecho a saberlo. Esto hay que pasarlo. No es lo mismo contarlo, que pasarlo. Yo lo viví. Esto es historia, ¿o no?", reflexiona Paulina al término del documento gráfico que ahora se ha conocido.