- Los nuevos pobres atendidos por Cruz Roja son más jóvenes -la edad media baja de los 65 a los 44 años-, la mayoría mujeres (60%), hay más españoles (80%), la mitad de los hogares tienen niños y aumentan las familias monoparentales.

La situación de las personas que han llegado por primera vez a Cruz Roja durante la pandemia es de “extrema vulnerabilidad”, alertó el coordinador general de la organización, Toni Bruel: nueve de cada diez de las nuevas familias viven bajo el umbral de la pobreza.

Estos son algunas conclusiones del informe Impacto de la covid-19 en la población atendida por Cruz Roja a través del Plan Responde, que distingue tres tipos de usuarios: los que no habían superado la anterior crisis, los que tenían dificultades para llegar a fin de mes y las personas en situación normalizada que han entrado al carro de la precariedad por el contexto generado por la covid.

Quienes han acudido a Cruz Roja por primera vez tras la pandemia afrontan las situaciones más dramáticas: el 95% de sus hogares están en riesgo de pobreza o exclusión, frente al 73% de las personas que atendía Cruz Roja antes de la covid.

Más cifras que lo subrayan: el 92% están por debajo del umbral de la pobreza (antes, el 67%), el 63% de los nuevos tiene privación material severa (antes lo sufrían el 39%) y el 56% tiene en paro a todos sus miembros en edad laboral (antes la mitad).

Hay una mayor proporción de hogares con hijos menores de 16 años, ahora son el 50%, cuando antes de la covid eran el 20%, la tasa de pobreza infantil se ha disparado hasta el 95,6% y hay mayores tasas de desempleo (30,5% frente al 24,8% previo).

En conjunto, el 57,5% de las personas atendidas se sitúan en la pobreza extrema, cuando en la población general es del 2,9%, detalla la investigación desarrollada con la Universidad Carlos III de Madrid.

La situación económica de las personas que reciben ayuda de Cruz Roja ha empeorado para una de cuatro personas. En estos hogares, de media se ha pasado de tener unos ingresos mensuales de 1.057 euros a a 486 de media.

Son también más los desempleados (el 51,7%, frente al 24,8% de los antiguos usuarios) y también más alta la tasa de trabajadores pobres respecto al conjunto de la población atendida (90 frente al 82).

El informe incorpora encuestas a 1.507 usuarios del Plan Responde entre marzo y junio de 2020. El 56% afirma tener un estado de salud regular, malo o muy malo y el 35% señala que ha empeorado con la covid.

Como consecuencia indirecta de la pandemia los trastornos psicológicos o emocionales tienen un impacto decisivo: el 66% afirma tener algún problema emocional siempre o la mayor parte del tiempo. Los más extendidos: preocupación (43,1%), tristeza (28.9%) y depresión (24,9 %).

A Cruz Roja le preocupa mucho el pesimismo expresado por las personas con las que trabaja: el 61% cree que va empeorar todo, (antes el 26%)

En cuanto al Ingreso Mínimo Vital, solo un 24,3% de los encuestados lo había solicitado y se les había concedido a 6 de cada 10. Más de un tercio de los demandantes han tenido problemas con la solicitud.

Acceso a internet. El 63,8% de hogares atendidos por Cruz Roja no dispone de ordenador y el 46,6% no tiene acceso a internet, fruto de la brecha digital causada por la pobreza.