Becky Siegel y Kon moción siguen explorando la danza y la diversidad. Nueva prueba de ello es el proyecto ‘Maneras de ver’, en el que diez bailarines con y sin discapacidad visual descubren nuevos sentidos para conceptos como percepción, espacio, prejuicio... El 5 de abril en Zizur Mayor.

El casting me lo hicieron ellos a mí”, cuenta Becky Siegel, coreógrafa y fundadora de la compañía Kon moción. Se refiere a Maneras de ver, proyecto en el que dirige a cinco de sus bailarines habituales con otros cinco que nunca ha-bían bailado y que tienen distintos grados de discapacidad visual con el objetivo es “descubrir otra danza”, la que existe más allá de lo que ven nuestros ojos. Aplicar otros sentidos, explorar otras formas de mirar, experimentar otras sensaciones y reflexionar sobre conceptos como espacio, percepción o movimiento son otros fines de esta propuesta que se estrenará el 5 de abril en la casa de cultura de Zizur Mayor.

Respaldada por el programa Innova Cultural de Fundación La Caixa y Fundación Caja Navarra, esta iniciativa supone un nuevo paso en la línea que Siegel y Kon moción abrieron en 2013 con una primera actividad no enfocada a la exhibición en la que trabajaron con personas con enfermedades crónicas, “de manera terapéutica, con la intención de usar la danza para aliviar el sufrimiento”. Continuaron en 2016 con Sobre ruedas, un espectáculo realizado en colaboración con Lua, compañía de la asociación Amimet, en la que demostraron que la creatividad vence a la discapacidad física. Y en 2018 con El baile de los años, montaje con Ados Teatroa que conectaba sobre las tablas a personas de tres generaciones distintas, con especial atención al colectivo de la tercera edad. Un extenso camino en torno a la danza y a la diversidad que ahora pone el foco en la discapacidad visual con Maneras de ver.

Los ensayos comenzaron en enero en el Centro de Arte Contemporáneo de Huarte, donde los/as participantes se reúnen dos veces por semana en sesiones en las que también participan la fotógrafa Blanca Razquin y Jesús Iriarte, que realiza un documental sobre el proyecto. Dos profesionales “que trabajan en medios visuales y que en este caso tienen que encontrar la forma de transmitir cómo es la danza cuando no se ve”, dice Siegel.

desafíos Sin duda, a la coreógrafa estadounidense afincada en Navarra desde 1992 le gustan los retos, “y este es el más grande que he tenido hasta ahora”. “La responsabilidad tanto por el bienestar de los cinco bailarines con discapacidad como por el resultado artístico del montaje es tremenda”, y le está quitando un poco el sueño, aunque, a la vez, “el proceso está siendo muy rico”. Para todos, también para sus bailarines habituales, “que son extraordinarios como artistas y fuera de serie como personas”. “Son muy grandes, no solo aportan su experiencia profesional, sino que velan en todo momento por sus compañeros, esto es una enseñanza para la vida”, agrega la fundadora de Kon moción, que llegó a los otro cinco bailarines a través de la delegación navarra de la ONCE y de su coordinadora cultural, Miriam Tendero. “Me los presentó, les comenté mi propuesta y mi manera de trabajar y en realidad fueron ellos los que me eligieron a mí”, señala. “Son muy diferentes entre sí, algunos son ciegos de nacimiento, otros han perdido la visión por una enfermedad o la están perdiendo ahora”, cuenta, y destaca la “entrega” que han demostrado en todo momento.

Antes de iniciar la fase de ensayos, Siegel y los bailarines de la compañía recibieron formación en la ONCE, y entonces “descubrimos que las personas invidentes tienen una sensibilidad especial hacia el espacio, igual que los bailarines”, así que desde el principio “se generó un ambiente de mucha confianza, y quizá es ahora, una vez avanzado el proyecto, cuando hay más nervios hay porque también ha aumentado la exigencia”, continúa. Maneras de ver será un espectáculo a caballo entre la coreografía fija y la improvisación coreográfica en el que se explorarán distintas cuestiones, como, por ejemplo, “qué es ver y qué es la danza cuando no se ve”. En ese sentido, se trabajará también el texto “para que los bailarines expliquen qué sienten”. Siegel recuerda que cuando empezaron a prepararse, “mis bailarines experimentaron lo que era bailar con los ojos cerrados, y es curioso, porque en algunos casos les ayudó a que les salieran cosas que llevábamos años trabajando”, lo resulta muy significativo. “Y es que a veces la vista se convierte en un obstáculo porque la percepción muchas veces está acompañada de ideas preconcebidas”. Además, en estos tiempos, “estamos rodeados de pantallas que arrojan imágenes constantemente, muchas de ellas falsas, y este espectáculo también es mi pequeña rebelión contra eso”, subraya la coreógrafa. La sensación de invisibilidad, a veces mala porque la indiferencia duele, a veces buena por la libertad que ofrece, también se aborda en esta propuesta que bailará al ritmo de new age, jazz y pop.

mejor docente Becky Siegel está convencida de que estos montajes son oportunos “porque la sociedad necesita humanizarse”. Entre otras muchas cosas, a ella le han servido “para ser mejor profesora”. “He aprendido a trabajar con limitaciones, lo que me ha enseñado a tener nuevos recursos también cuando doy clases a bailarines”, indica. “Es fantástico poder seguir renovándome y encontrar nuevos sentidos para la danza”, termina.

“A veces la vista es un obstáculo porque la percepción suele venir

con ideas preconcebidas”

becky siegel

Directora de ‘Maneras de ver’

Título. Maneras de ver.

Estreno. 5 de abril en la casa de cultura de Zizur Mayor.

Idea y dirección. Becky Siegel.

Bailarines. Montse Almendros, Oihane Andueza, Ion Barbarin, Mª José Casado, Txori García Uriz, Marié González, José Luis Irisarri, Carmen Solano, Ana Zabalza y Montse Zabalza.

Iluminación. Paco Iglesias.

Fotografía. Blanca Razquin.

Vídeo. Jesús Iriarte.

Gestión. Kati Leatxe.

Maneras de ver

Talleres. Kon moción ofrecerá talleres a profesionales de la danza de Navarra “para mostrarles cómo hemos trabajado”. De esta manera, la coreógrafa también quiere formar a otras personas para que estén preparadas para integrar la discapacidad en determinadas clases. “Porque todos sabemos bailar y los profesores tenemos que estar dispuestos a trabajar la diversidad”, dice Siegel.