o es, desde luego, el único escritor latinoamericano admirado por legiones de lectores exigentes. Parece ser, sin embargo, el autor ideal ante el lance taurino, el que puede costarle la vida, literaria, claro está... Alfredo Bryce Echenique pide permiso para retirarse a bordo de la tercera nave de una destacada flota: la formada por sus Antimemorias pero, en realidad, Permiso para retirarme es el nombre del nuevo libro de memorias que el escritor limeño ha elegido para hacer saber al mundo que hay verdad más allá del espectáculo.

Permiso para vivir (1993) y Permiso para sentir (2005) son los libros que han precedido a éste, el que ahora presenta el sello que ha dado vida a todos ellos, y la nueva entrega de la colección Narrativas Hispánicas de Anagrama es la que nos habla de La señora Echenique de Bryce, de El último bar de Lima, de Cecilia la malísima y Cecilia la buenísima, textos en los que el peruano se confiesa.

Así es: "Pepe Villaescusa ha fallecido hace pocos días en su hermosa casona de La Moraleja, y yo no he podido acompañarlo debido a una lesión en la columna vertebral que me tiene en silla de ruedas. Visitaré a Marisa, su viuda, no bien esté en condiciones de viajar. Por ahora solo me queda recordar esa colpa que dice: Algo se muere en el alma, cuando un amigo se va".

Cierto: cuando un amigo se va, algo se muere en el alma del lector enamorado de la seriedad de Un mundo para Julius, de la lectora interesada en las correrías de La vida exagerada de Martín Romaña, de todos quienes se acostumbraron a la pluma vertiginosa de Bryce Echenique, don Alfredo. Ahora bien: cuando un amigo se va, cuenta con toda esa prosa descabellada y cuenta, igualmente, con Los papeles de Herralde, nombre de Una historia de Anagrama. 1968-2000, subtítulo de otro libro recién estrenado en el que, bajo la batuta del ensayista y catedrático de Literatura Jordi Gracia, se repasa la experiencia del máximo responsable de la editorial barcelonesa.

El propio Bryce Echenique está presente en el segundo libro que ahora nos ocupa gracias a la llegada a este mundo de otras obras suyas, caso de A vuelo de buen cubero, a través de algunas de las numerosas cartas que Jorge Herralde envió al autor de Lima y a otros muchos textos, todos ellos de enorme interés e influencia.

¿Cómo puede el lector acercarse a la historia de Anagrama y a la de la literatura latinoamericana contemporánea sin dejarse llevar por las confesiones y los recuerdos de Bryce Echenique? ¿Cómo entender al escritor sin consultar tal guía? Permiso para retirarme es el nombre del tramo definitivo de esas memorias en las que su autor no deja de sorprendernos gracias a confesiones que te pillan desprevenido: "Era el verano de 1970 y había sobrevivido a un invierno de pesadilla que se alargó a medida que pasaban los meses. Cumplir con mi deber de profesor universitario era un verdadero calvario".

Por todo este universo de evidencias humanas, por un interesante conjunto de piedras preciosas, leer dichas memorias puede ser todo un mar de confusiones y vivencias de lo más reales. Cualquier cosa, menos... un calvario.

Autor: Alfredo Bryce Echenique. Editorial: Anagrama, 2021. Páginas: 234.

Alfredo Bryce Echenique ha elegido el nombre de este nuevo libro para hacer saber al mundo que hay verdad más allá del espectáculo

Por un interesante conjunto de piedras preciosas, leer dichas memorias puede ser todo un mar de confusiones y vivencias de lo más reales