- Osasuna se prueba esta tarde frente al Sevilla en otro encuentro ante un rival de máximo nivel por inversión en plantilla, objetivos y rendimiento durante la pasada temporada. El equipo de Arrasate afronta un partido muy exigente en el que no va a haber sorpresas acerca de lo que les va a tocar a los rojillos. Frente a otro contrincante de primer orden, el Atlético de Madrid la semana pasada, Osasuna fue capaz de competir e igualar durante muchos minutos las virtudes del rival y sólo faltó culminar con acierto en la portería contraria lo bueno que se hizo en gran parte de las labores defensivas. Indudablemente, para conseguir algo positivo en el Sánchez-Pizjuán habrá que mejorar en todos los órdenes y ofrecer una versión acorde a la cita. Aunque el público no pueda jugar su importante papel en el campo de Nervión -es un estadio especial por la presión del aficionado-, a Osasuna le aguarda de todos modos un examen de personalidad, porque el Sevilla es un equipo con carácter y aprieta de mil maneras.

Entre las buenas noticias del partido ante el Atlético, la puesta de largo afortunada de Budimir tendrá consecuencias en la cita de hoy. El delantero croata tiene todos los boletos para estar en el once titular y darle otro aire al juego ofensivo del equipo, necesitado de variantes, de nuevos registros. El espigado atacante es un perfil distinto para el 9, aunque también con centímetros para el juego aéreo, pero con recursos diferentes en el área y también facilidad para caer a las bandas.

Alrededor de Budimir parece que se montará un grupo para el ataque en el que Jony seguirá por la izquierda, no hay dudas sobre Rubén García como enganche por el centro y probablemente se produzca el retorno de Roberto Torres, que ofreció chispa al equipo ante el Atlético.

El resto del equipo dependerá del reparto de papeles que asigne Arrasate a algunos hombres, principalmente Íñigo Pérez. Habrá que ver si el chantreano sigue en el lateral izquierdo o pasa al centro del campo, en ese caso con posibles consecuencias para Juan Cruz, que regresaría al flanco izquierdo.

En el centro del campo, el entrenador rojillo también cuenta con alternativas para viajar junto a Oier en el eje. El internacional sub-21 Jon Moncayola o Lucas Torró pugnan por un puesto, ambos con características distintas, pero también los dos con poderío para desempeñarse en esa zona, donde el rival tiene futbolistas de calidad -Rakitic- y poderío -Fernando y Jordán-.

El Sevilla se pegó una buena paliza ante el Krasnodar en el partido del miércoles de Champions. Muchos minutos con un jugador menos por una expulsión, un marcador en contra pesado (0-2), pero remontada final. Es decir, rearme moral en toda regla. Además, la profundidad de la plantilla de Julen Lopetegui debería solventar cualquier esfuerzo añadido en distintos frentes.

El equipo andaluz llega obligado al partido ante Osasuna porque en la Liga no tiene el mismo brillo que en Europa. Un punto de los últimos doce posibles no está a la altura del nivel del equipo y habla de un bache en el torneo doméstico.

Pese al esfuerzo suplementario -Lopetegui criticó ayer que no se jugara el domingo- no se prevén muchos cambios en el once, con el regreso del meta marroquí Yassine Bono en lugar del checo Tomas Vaclík, titular en el choque contra los rusos. La defensa se mantendría con Navas, pese a su desgaste por haberlo jugado casi todo, el galo Koundé, el brasileño Diego Carlos y Escudero, sacrificado antes del descanso ante el Krasnodar al entrar el argentino Acuña; con Rakitic, Jordán y Fernando en la media; y en ataque el argentino Ocampos, el holandés De Jong y el marroquí En-Nesyri, autor de un doblete decisivo ante el Krasnodar y que podría suplir a Munir.

Los descartes. Arrasate descartó a los futbolistas con problemas físicos, caso Juan Pérez, Darko Brasanac, Brandon Thomas, Aridane, Jonathan Calleri y Chimy Ávila. Tampoco han viajado Javi Martínez, Aimar Oroz y Kike Saverio. La expedición es de 21 jugadores.

Y además Rakitic. El conjunto andaluz ha sumado al potencial de la pasada temporada la calidad de Rakitic, que ha regresado tras su paso por el Barcelona.

Un punto de doce. El Sevilla ha logrado un punto de los últimos doce disputados en Liga.

Los últimos partidos

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Osasuna no gana en el Sánchez-Pizjuán desde hace catorce años -el 5 de febrero de 2006-, cuando lo hizo con Javier Aguirrre en el banquillo y gol de Savo Milosevic (0-1).