Canasa, sociedad gestora del Canal de Navarra, ha propuesto un incremento de las tarifas de riego y abastecimiento aplicables en los ejercicios 2026 y 2027, durante la reunión de la Comisión de Seguimiento del convenio del Canal de Navarra, celebrada este jueves en las oficinas de ACUAES de Zaragoza. La empresa está compuesta en un 60% por el Estado y en un 40% por la Comunidad Foral.
En tanto se apruebe un marco tarifario definitivo con el lanzamiento del proyecto de la segunda fase del Canal, la sociedad mercantil propone esta subida del 2% anual para los próximos dos años, que será recogido en el convenio a suscribir entre Canasa y la Comunidad General de Regantes del Canal de Navarra, ha explicado la sociedad pública en la nota de prensa.
Los regantes no se han pronunciado sobre esta propuesta, que ahora la estudiarán y en el plazo de unos diez días responderán.
Asistentes al encuentro
En la reunión han participado la presidenta de ACUAES y directora general de Canasa, Mª Rosa Cobo; el presidente de la Comunidad General de Regantes del Canal de Navarra, Félix Chueca; en representación del Consorcio de Abastecimientos del Canal de Navarra, César Pérez; y por parte del Gobierno de Navarra han asistido el director del Servicio de Gestión Económico-Presupuestaria y Control del Gasto del departamento de Cohesión Territorial, Pedro Cebrián, y el subdirector del Instituto Navarro de Tecnologías e Infraestructuras Agroalimentarias y responsable de Riegos de Navarra, Joaquín Puig.
¿Qué ocurre con la segunda fase?
Durante la reunión también se ha tratado la situación del proyecto de la segunda fase del Canal, que se encuentra en el trámite de aprobación final del proyecto por parte de la Dirección General del Agua del Ministerio de Transición Ecológica (Miteco). Este trámite es clave para iniciar la licitación de la obra, pero todavía quedan temas pendientes, como el convenio entre Canasa y regantes, concretar la financiación del Banco Europeo de Inversiones y cuál va a ser la fórmula de pago de la infraestructura que afecta a los usuarios.
En un principio, la licitación se retrasará hasta 2026, y habrá que ver si en ese mismo año pueden comenzar las obras o habrá que esperar a 2027.