uchas son las iniciativas que, por un lado, tratan de ayudar a las personas más vulnerables y que, por otro lado, intentan que estos días sean lo más amenos posibles. Lerín no es ajeno a este movimiento y los ciudadanos, sabedores de que toca arrimar el hombro, han puesto en marcha una serie de iniciativas para colaborar y hacer más llevadera esta situación de alarma por el coronavirus.

En primer lugar, y gracias a la disposición del agricultor Ángel Mari Moreno, el pasado sábado hicieron una limpieza a fondo del casco urbano. La acción, coordinada por el Ayuntamiento, contó con los tractores de cuatro vecinos además de varios lerineses que se ofrecieron voluntarios para ayudar allí donde fuese necesario. Mañana sábado de madrugada, desvelaba la alcaldesa Consuelo Ochoa, van a repetir este procedimiento y así seguirán una vez por semana ya que, aseguraba, "da mucha tranquilidad y una gran sensación de seguridad".

Además, la brigada limpia entre semana con cisternas y pulverizadores aquellos puntos más transitados y problemáticos; la calle Mayor, el entorno del centro de salud y la zona de contenedores.

Como toda ayuda es poca, y pensando en las personas mayores, Isabel Zabalza y su madre, Mª Ángeles Yanguas, propusieron hacer mascarillas para donar allá donde fuese necesario. La respuesta ha sido un éxito y han sido muchas las personas que han donado sábanas para este fin.

El Ayuntamiento ha comprado las gomas y la idea es confeccionar entre 1.400 y 1.500 mascarillas.

Con todo desinfectado, las primeras han ido a la residencia de ancianos y también se van a repartir entre los vecinos del municipio que tengan más de 65 años para que cuenten con ellas en caso de necesidad. También se llevarán a otras poblaciones que lo requieran como el caso de Barásoain, donde ya han dejado 50.

Por último, y por iniciativa de Óscar Ontoria, miembro de la banda de música, todas las tardes después de aplaudir a las 20.00 horas los vecinos interpretan, o bien con instrumentos musicales o bien a viva voz, la canción Ay qué guapa está la Dorotea. Se trata de una letra popular del municipio que alude a uno de sus gigantes y que han adaptado a las circunstancias actuales. El Ayuntamiento, además, colabora poniéndola desde los altavoces. "La gente ha respondido de maravilla, es un momento muy nuestro y que nos da cierta alegría", exponía Ochoa.

De acuerdo con la alcaldesa, "la situación está, por suerte, estable" pero, por si acaso, han creado un banco de ayuda para personas mayores de 75 con la idea de paliar cualquier carencia o incidencia que pueda haber. Ochoa asegura que la situación está afectando a muchas personas pero que no pueden, ni deben, tomar otras medidas de forma precipitada.