El Gobierno de Navarra, por medio de la dirección General de Políticas Migratorias, y el Ayuntamiento de Tudela van a colaborar en un proyecto de acogida para personas procedentes de campos de refugiados del Líbano, que emplea el acompañamiento a las extranjeras y extranjeros como metodología de trabajo, un método en el que Navarra será la tercera comunidad del Estado en llevarlo a cabo.

Se trata de un programa que se sustenta en un modelo de acogida comunitaria que apuesta porque sea la propia comunidad quien proporcione apoyo integral a las personas recién llegadas. Esta iniciativa ya ha sido probada con éxito en el País Vasco y la Comunidad Valenciana.

El encargado de coordinar la puesta en marcha del proyecto es el Servicio Karibu, de la dirección General de Políticas Migratorias, que dirige Virginia Eraso. Además, se ha dado a conocer que la entidad que va a poner en marcha este novedoso modelo de acogida en Navarra va a ser la Fundación Civil San Francisco Javier, a través del Centro Padre Lasa, cuyo director es Sergio Iturre.

La directora general de Políticas Migratorias, Patricia Ruiz de Irízar, ha agradecido a la concejala Anitxu Agüera "la receptividad mostrada", y la sintonía "en los objetivos de acoger y acompañar, de la forma más conveniente y humana, a las personas que huyen de sus lugares de origen por sufrir amenazas ciertas". En este sentido ha señalado que "creemos que Tudela, como capital de la Ribera, es una ciudad donde el patrocinio comunitario puede ser un auténtico ejemplo, en una zona con una mayor presencia de personas migrantes y, por ello, más sensibilizada sobre los problemas que sufren muchas de ellas", ha señalado.

Para la directora general de Políticas Migratorias, "es una vía efectiva para canalizar la solidaridad que la sociedad navarra demuestra siempre que se le necesita"; y apuesta por "convertir a la comunidad en agente activo de acogida, acompañamiento e inclusión". Además ha destacado que "es imprescindible contar con el apoyo de las entidades locales, que son las que se encuentran más pegadas a la calle en sus ciudades, municipios y barrios. Los ayuntamientos pueden encontrar, con mayor facilidad, tanto las situaciones concretas en las que debe intervenirse como las personas y los mecanismos que permitirán una intervención más rápida y eficaz".