La saturación de las urgencias hospitalarias y ambulatorias ante el repunte de casos de gripe y covid-19 ha apremiado a las autoridades sanitarias de Navarra y la CAV a adoptar medidas especiales, recomendar el uso de la mascarilla, además de reforzar las normas de higiene. Las festividades navideñas de reunión con familiares y amigos favorecen la transmisión de infecciones respiratorias y el virus de la gripe -que pasó a un segundo plano durante la pandemia- ha desplazado al covid a falta de dos semanas, según los expertos, para que alcance su punto álgido.

En este momento, se registran más de un centenar de casos de gripe por cada cien mil habitantes, el doble que el covid. Para frenar la demanda asistencial, en Navarra se ha establecido un nuevo triaje de manera que las personas de 19 a 40 años con síntomas leves serán remitidos a los centros de Buztintxuri o San Martín. Hacer un buen uso de las urgencias es una vieja demanda que ahora cobra más que nunca sentido.

También la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria pide volver a la mascarilla obligatoria en centros de salud. Pero más allá de las medidas preventivas en este arranque de año que nos marca nuevos retos y propósitos no podemos olvidar todo lo que nos ha enseñado la pandemia, no sólo en todo lo que significa temer al virus, sino a la hora de tomar conciencia de cómo prevenir y evitar riesgos sin esperar a que nos obliguen desde arriba. Es decir, apelar a la responsabilidad individual, proteger a los nuestros y a los colectivos vulnerables, mantener el distanciamiento físico en espacios concurridos, reforzar la higiene de manos, cubrir la boca y nariz al toser y estornudar, y ventilar espacios.

Quizás no queramos recordar los malos momentos vividos pero sería una temeridad creer que no va a haber nuevos virus o bacterias (ya se les ha puesto nombre) o blindarnos en una burbuja de irrealidad y desconfianza. No parece descabellado que la persona que tiene un trancazo se pusiera por ejemplo la mascarilla en el bus. Y si, además, las enfermeras van a poder recetar ibuprofeno y paracetamol tampoco tiene sentido hacerse tests sin ton ni son porque el tratamiento es el mismo para todos los procesos catarrales. Al menos nos consuela saber que el virus de la gripe o de la covid no es más grave que el de otros años, que un porcentaje importante de la población está vacunada y, en el caso de la gripe, también los menores de cinco años.