"A dónde vas, manzanas traigo”, la respuesta del Sr. Huarte a nuestra carta del pasado 20 de junio evita referirse a los hechos ocurridos durante su presidencia en el Auditorio de Barañáin que aparecen acreditados en la sentencia judicial 75/2019 (Juzgado de lo Social nº1 de Pamplona, procedimiento 636/2018) como son el “acoso laboral” y la “vulneración de la integridad física y moral a varias personas trabajadoras” en el Auditorio Barañain.

Ante unos hechos probados judicialmente, esperábamos al menos una explicación, un reconocimiento o una muestra de arrepentimiento. Algo que ayudara a comprender los motivos de lo que la sentencia califica como” trato degradante” o “una agresión compleja, continuada y sistemática” a varias trabajadoras del auditorio (pág. 18, punto 6). Pero no, el Sr. Huarte no sólo evita el tema sino que vuelve a usar la táctica de sembrar confusión con falsos datos, acusaciones infundadas y medias verdades. Esta respuesta que, además de evasiva, incurre en injurias y calumnias al apoyarse en afirmaciones falsas y no respaldadas por ningún hecho probado, tendrá una respuesta legal por difamación. No aceptaremos que se utilicen falsedades para ocultar hechos que están documentados en sentencia.

Es importante atenerse a los hechos. Y es un hecho que el Auditorio Barañain disfrutaba de un excelente clima laboral desde sus inicios en 2003 hasta 2016.

Bakarne Atxukarro, Marian Yarnoz y Mikel Artxanko, firmantes de esta carta, formaban parte central del equipo que gestionaba el auditorio desde 2003, periodo en el que el Sr. Huarte trabajaba prestando servicios de técnico de sonido como autónomo.

Es en 2016, cuando el Sr. Huarte se elige como concejal de cultura por Podemos Navarra y accede de forma directa a la presidencia del Auditorio Barañain, que la plantilla de trabajadores comienza a vivir “un auténtico calvario”. En la pág. 4 pto sexto de la sentencia se describen los hechos: “las relaciones con los responsables de los distintos departamentos fueron empeorando de forma progresiva” el Sr. Huarte “dudaba de su profesionalidad, les fiscalizaba en exceso y de forma intensa, hablaba mal de ellas en la Junta del Patronato y en el Ayuntamiento y no valoraba su trabajo”. En resumen, en julio de 2018, dos años después de la llegada del Sr. Huarte a la presidencia, ninguna de las 4 personas que trabajaban en oficina en la gestión del Auditorio con contrato fijo, quedaban en plantilla. Una plantilla que durante 15 años había trabajado con tanto compañerismo, garra e ilusión para el proyecto del Auditorio Barañáin.

El acoso laboral desembocó en que “tres trabajadoras dejaron de prestar servicios: una por baja voluntaria y dos por excedencias”, (pág 3, pto 6 de la sentencia). De hecho, todas, a excepción de Mikel Artxanko dejaron de prestar servicios”. Y ese fue el motivo por el que el Sr Huarte despidió a Mikel Artxanko, porque fue el único que resistió al acoso. No consiguió que se fuera. El Sr. Artxanko fue a juicio contra ese despido y ganó. El ministerio Fiscal declaró nulo el despido por varias razones, entre ellas, porque quedó acreditado el acoso laboral (Pag. 18 pto. 6 de la sentencia) y la “vulneración de la integridad física y moral” del trabajador (Pag. 21, apart. fallo).

Ahora que el Sr. Huarte presenta su candidatura para ser el lider de Podemos Ahal Dugu Navarra es el momento de dirigirnos tanto a los miembros de su partido como a sus votantes para que sean conscientes de a quién tienen entre sus filas y quién aspira a dirigirlos.

Es el momento, además, de visibilizar los efectos devastadores que el acoso laboral produce en las personas que lo sufren y sus familias. Las personas afectadas por el acoso laboral del Sr Huarte sufrieron trastorno ansioso-depresivo con cuadros de insomnio, miedo extremo al trabajo, tristeza profunda, bloqueos mentales, pérdida de sentido vital y pensamientos autodestructivos que, en el caso del Sr. Artxanko fue, además, demostrado en el juicio. (pag. 9 pto. 16).

Los hechos aquí descritos han sido reconocidos como acoso laboral en sede judicial, con un impacto demostrado sobre la salud física y mental de las varias personas que lo sufrieron. Es fundamental evitar que personas con este histórico accedan o se mantengan en cargos públicos, ya que su comportamiento no solo vulnera derechos fundamentales, sino que erosiona la integridad de las instituciones y pone en riesgo la salud y la dignidad de quienes trabajan bajo su autoridad.

Nos resulta incomprensible y alarmante que un partido “a priori” progresista, defensor de los derechos laborales y la justicia social, que aspira a representar la izquierda navarra, permita que alguien con estos antecedentes pueda presentarse como candidato a liderar el partido en Navarra. Por ello, hacemos un llamamiento a la dirección de Podemos Navarra / Contigo Navarra – Zurekin Nafarroa y a toda su base social, para que:

-Reconsideren esta candidatura inmediatamente.

-Impulsen procesos internos que garanticen la coherencia ética entre los principios del partido y las personas que lo representan.

-Escuchen a las víctimas y testigos de estos hechos, que durante años sufrieron y denunciaron estos hechos probados y recogidos en la sentencia del 21 de marzo de 2019.

Firman este artículo: Marian Ángeles Yarnoz Andueza, Bakarne Atxukarro Estomba, María Isabel Ferreira Zarzuela, Mikel Artxanko Mantxo e Ioritz Lestón Aristu Personas víctimas y testigos directos de los hechos relatados