Osasuna y el agente del Chimy Ávila han abordado la ampliación del contrato del delantero, que termina su vinculación con el club en junio de 2023 y tiene una cláusula de rescisión de 25 millones de euros. El representante del jugador ha estado recientemente en Pamplona para hablar con la dirección del club sobre la posibilidad de continuar más tiempo -una temporada más- en la entidad. El futbolista ya sabe las condiciones que le plantea Osasuna en una situación especial como es la de un jugador que lleva un año lesionado -con dos percances de gravedad en cada una de sus rodillas-.
El pasado 24 de enero se cumplió un año de su primera lesión de rodilla, la segunda fue en septiembre -el día 9- y, desde la segunda intervención, al atacante argentino le quedan todavía por lo menos dos meses más para que pueda comenzar a entrar en los planes del entrenador, siempre que no hayan retrocesos.
