Pasados los fastos de la renovación de Jagoba Arrasate como entrenador de Osasuna hasta junio de 2024, el conjunto navarro ya está centrado en su próximo compromiso liguero, el que el próximo domingo a partir de las 21.00 horas le va a enfrentar con el Barcelona en el Camp Nou, escenario en el que solo tres de los integrantes de la actual plantilla rojilla han marcado: Roberto Torres, Kike García y Ante Budimir.

El único que lo ha hecho con la camiseta rojilla es el centrocampista de Arre. Y en dos ocasiones, aunque Roberto Torres no guarda el mismo recuerdo de sus dos tantos a Ter Stegen en la Ciudad Condal. Y es que el primero de ellos lo anotó en la severa derrota que encajó el conjunto navarro en la jornada 34 de la temporada 2016-2017, una sonrojante goleada (7-1) que además propició el descenso matemático a Segunda División de un equipo entonces entrenado por Petar Vasiljevic, mientras que el segundo y más reciente sirvió para que Osasuna ganara en el Camp Nou (1-2) en la jornada 37 de la temporada 2019-2020, la primera de los rojillos en la máxima categoría tras su más reciente ascenso y ya con Jagoba Arrasate en el banquillo.

Torres abrió su cuenta goleadora en el Camp Nou el 26 de mayo de 2017, fecha de infausto recuerdo para el osasunismo. Los rojillos llegaron entonces a Barcelona con algo más que el agua al cuello y fue allí donde se ahogaron de forma definitiva. Osasuna perdió cualquier opción de permanencia a cuatro jornadas de la conclusión del campeonato al caer estrepitosamente ante un Barça que le vapuleó (7-1) con dobletes de Messi, André Gomes y Paco Alcácer y el primer y único gol del argentino Javier Mascherano como futbolista del cuadro catalán, tanto que logró de penalti y que generó una ridícula polémica en un sector del osasunismo por la celebración del mismo en un banquillo, el culé, en el que por aquel entonces se sentaba Juan Carlos Unzué como ayudante de Luis Enrique.

El gol del honor de Osasuna lo marcó aquel día Roberto Torres con un magistral lanzamiento de falta directa desde la frontal del área cuando el partido todavía no estaba decidido (fue el 2-1 y llegó en el minuto 47) y el centrocampista navarro tuvo que esperar algo más de tres años para sacarse la espina. Y lo hizo a lo grande el 16 de julio de 2020, cuando en el minuto 94 de un partido en el que el conjunto navarro se había adelantado (con un gol de Arnaiz en el minuto 15) y que Messi había nivelado en la segunda parte (minuto 61), el futbolista de Arre marcó el 1-2 definitivo al empujar a la red una asistencia de Kike Barja con la que los rojillos culminaron una contra de libro.

Kike García también sabe lo que es marcar en el Camp Nou. Lo logró en la jornada 16 del curso pasado con la elástica del Eibar. El conjunto armero, que terminó perdiendo la categoría -circunstancia decisiva para que el delantero de Motilla de Palancar acabara fichando por Osasuna sin coste de traspaso-, se adelantó aquel día en Barcelona con un tanto al contragolpe del ahora futbolista rojillo, aunque luego Ousmane Dembelé puso firma al gol del empate definitivo (1-1).

Además de Roberto Torres y Kike García, Ante Budimir también ha celebrado goles en el Camp Nou, aunque no demasiado, ya que los dos que anotó enrolado en las filas del Mallorca, su anterior equipo antes de recalar en Osasuna a cambio de 8 millones de euros (más IVA), en la jornada 16 de la temporada 2019-2020 no le sirvieron para mucho al conjunto bermellón. Y es que fue el Barcelona el que se apuntó el triunfo pese al doblete del atacante croata (5-2).

La experiencia en un escenario de tronío como el Camp Nou aparece como un elemento muy a tener en cuenta para el choque del domingo, y más en lo que tiene que ver con el gol, porque el Barça está viendo portería con facilidad en sus últimos partidos (tanto en la Liga como en Europa) y se antoja complicado que Osasuna pueda salir de la Ciudad Condal sin encajar, por lo que anotar puede convertirse en condición indispensable para tener opciones de puntuar en una de las más complicadas salidas que les quedan a los rojillos de aquí a final de curso.

Roberto Torres. El centrocampista de Arre, que el pasado lunes cumplió 33 años, le ha metido dos goles al Barcelona en el Camp Nou, pero su cuenta anotadora contra el conjunto catalán resulta aún más amplia teniendo en cuenta también los partidos disputados en El Sadar, donde marcó los dos tantos de su equipo, uno de penalti, en el 2-2 de la temporada 2019-2020.

Kike García. El delantero de Motilla de Palancar (Cuenca), de 32 años, se estrenó como goleador en el Camp Nou el curso pasado con el Eibar, equipo con el que, pese al descenso a Segunda, firmó el mejor registro anotador de su carrera (12 goles).

Ante Budimir. El croata, de 30 años, logró un doblete con el Mallorca en el Camp Nou, donde el curso pasado marcó un gol con Osasuna, pero en fuera de juego.