Es un hecho que un club que juega competiciones europeas es más atractivo para diversos futbolistas que quieren mostrarse al mundo. Osasuna era uno de esos clubes, pero debido al stand by en el que le mantiene la posible sanción de la UEFA, la entidad navarra ha perdido la oportunidad de incorporar futbolistas diferenciales.
Osasuna está empezando a pagar las consecuencias de la incertidumbre sobre su participación en la próxima edición de la Liga Conferencia. Según ha podido saber este periódico, dos futbolistas han decidido no esperar a que el club resuelva la situación con la UEFA, que se plantea sancionar a Osasuna sin competición europea debido a los amaños que se dieron por parte de la antigua directiva en la temporada 2013-2014.
El hecho en sí mismo de no disputar la Conference no es el único castigo, sino que ya está afectando a la confección de la plantilla para la siguiente campaña. Que Osasuna pudiera competir en Europa 16 años después suponía un atractivo para que futbolistas importantes se fijaran en el proyecto, pero esta teórica sanción, considerada “injusta” por instituciones, deportistas y aficionados, frena los planes de expansión deportiva.
Esta incertidumbre no solo afecta a las posibles llegadas, sino que también es perjudicial para convencer a los futbolistas que ya pertenecen al club de que se queden en Tajonar. La exclusión de la Conference significaría disputar menos partidos durante la próxima campaña, por lo que algunos jugadores que no poseen un rol fundamental en el equipo podrían buscar minutos fuera.
Mientras se espera a la decisión, Osasuna seguirá confeccionando su plantilla para la próxima temporada, con el hándicap de no conocer, de momento, el futuro europeo del equipo.
