Osasuna disfruta de dos días libres mientras se confirma si juega, como parece, el día 27 ante el Barcelona. A los rojillos les quedan 11 encuentros para acabar la Liga de los cuales siete se disputarán lejos de El Sadar, algo que deja con solo cuatro partidos en casa. Los rojillos suman solo una victoria fuera de Pamplona, por lo que tendrán que mejorar en esa faceta para evitar problemas.
Si la RFEF confirma el encuentro del Barcelona el próximo 27 de marzo, los tres siguientes partidos de Osasuna de disputarán a domicilio. Los rojillos visitarían en apenas semana y media Barcelona, Bilbao y Leganés. Los dos primeros están entre los cinco mejores locales, pero el tercero no está obteniendo grandes resultados en casa. Por su parte, hay que recordar que el equipo de Vicente Moreno es el cuarto que peor resultados está cosechando a lo largo de la Liga, con solo nueve puntos obtenidos gracias a una victoria, seis empates y cinco derrotas.
Después de ese carrusel de partidos fuera de casa, Osasuna recibirá en El Sadar al Girona, en un encuentro complicado. Después viajará hasta Valladolid, para visitar al colista en una salida que ya está marcada en rojo para el devenir de la temporada. Luego vendrá a El Sadar el Sevilla para cerrar abril.
Mayo exigente
El siguiente mes arrancará con otra doble salida a domicilio contra dos rivales de arriba, primero Villarreal y segundo Betis. Luego tendrá dos partidos en casa: contra un Atlético que puede llegar con opciones de llevarse el título y contra un Espanyol peleando por el descenso. Por último, la temporada se cerrará con otra salida, esta vez ante el Alavés, en un derbi que puede tener mucho en juego...o nada.
Así pues, siete encuentros fuera, con muchos rivales peleando por diferentes objetivos, que hacen que Osasuna deba mejorar, y mucho, para evitar problemas.