EEUU- Un conductor estadounidense de 42 años, en la ciudad de Destin (Florida) se presentó en un concesionario para adquirir un deportivo Porsche 911 Turbo de 2014, valorado en casi 120.000 euros. Tras presentar un cheque bancario con ese importe, el trabajador del concesionario realizó el contrato de venta y le entregó el vehículo. La Policía localizó al estafador y durante el interrogatorio, confesó que había impreso los cheques bancarios falsos en su casa.