- El presidente de la Federación Navarra de Municipios y Concejos (FNMC), Juan Carlos Castillo, aseguró ayer que esta pandemia tiene que servir para “aprender de los errores” y estar “mejor preparados” para futuras crisis con “un plan de actuación que nos permita ser más ágiles”. Tras conocer que este viernes concluyen la mayoría de las restricciones, adelantó que desde la Federación de Municipios quieren aportar propuestas a partir de un diagnóstico que debería iniciar el Gobierno foral de “lo que ha funcionado desde el punto de vista sanitario y jurídico en esta pandemia, y los problemas que hemos tenido de cara a afrontar futuros planes de emergencia”. “Creemos que para tomar decisiones en las que nos protejamos desde el punto de vista de la salud y sin dañar la economía tenemos que hacer una lectura crítica desde todas las administraciones”, reveló. “Tenemos que sentarnos y valorar las acciones que se han adoptado desde el Gobierno foral y también desde las entidades locales. Tener una normativa diferente cada quince días nos atasca a todas las administraciones”, remarcó.

“Hemos tenido muchas dudas sobre la aplicación de medidas (órdenes forales, estatales...) que eran cambiantes y que no dejaban tiempo, sobre todo al principio, para aportar algo desde lo local. Y ello a pesar de que hubo una mesa entre el Gobierno y la FNMC en la que semanalmente tratábamos de aclarar dudas y aunar criterios. Ha habido que suspender contratos, gestionar indemnizaciones, cerrar centros y servicios que después había que reabrir con lo que ello supone de pérdidas económicas, dificultad de prestar un buen servicio a la ciudadanía y un retraso en los expedientes“, reiteró. “Nos hemos dedicado desde los ayuntamientos no solo a vigilar a los ciudadanos sino a poner en marcha muchas medidas de apoyo a diferentes sectores y de escucha a los problemas ciudadanos”, subrayó. Castillo insistió en que, desde los ayuntamientos se ha aplicado la normativa estatal o foral “muchas veces desde una visión muy urbana”, de ahí la necesidad de que exista en un futuro una “mayor colaboración”. “Un caso claro fue la imposibilidad de que los vecinos pudieran cultivar sus huertos”, reiteró.

“Hemos hecho lo que hemos podido, hemos sido una esponja importante. Lo más duro de este año y medio largo seguramente ha sido tener que estar en medio de decisiones que no contentaban muchas veces a bandos enfrentados y con la misma normativa. La gente venía a los ayuntamientos a quejarse. Por un lado, había quien no quería que se permitiera ninguna medida porque tenían miedo al contagio principalmente, y que nos decían que íbamos a acabar con el planeta, y otros que nos llamaban dictadores y que se quejaban de que no les dejábamos hacer nada. Ni siquiera era un tema generacional, había gente mayor más conservadora pero también quien estaba en contra de las restricciones en ese tramo de edad, y lo mismo ocurría con la gente joven”, resaltó.

Para Castillo, en la confrontación de opiniones ha incidido el color del gobierno en el Estado aunque el debate “trascendía de lo ideológico”. En este sentido, entiende que si bien las personas de derechas han sido más críticas con las medidas también “el efecto Ayuso con el lema de libertad a la hora de salir a la calle fue un factor determinante como promotor de la quinta ola. Se vio claramente a partir de la primavera con un discurso que venía a mantener que quienes aprobaban restricciones estaban coartando libertades; es decir, te dejo echar tres cañas y soy más valiente que quienes gobiernan en el Estado...”.

En cualquier caso, el presidente de la federación cree que hay que ser “prudentes” a partir de ahora. “Navarra ha sido una comunidad que ha vivido momentos muy difíciles, seguramente por la actividad social pero también por la movilidad que ha existido y existe en todos los niveles también económico. En Peralta sin ir más lejos lo hemos visto de cerca. Lo hemos pasado mal porque hay mucha gente iba y venía, no sólo a las fábricas sino también a comprar, a comer... la gente se movía”, subrayó. “Cuando dicen que los vascos y navarros somos fríos digo que no es cierto o al menos hemos roto los esquemas con el covid”, comentó.

Respecto a las nuevas medidas, cree que la apertura de bajeras y la ampliación de horarios en los bares ha contribuido a reducir los botellones “y también la violencia en las calles, lo estamos notando en todos los sitios”. “Este mes hemos pasado la prueba de fuego, con el incremento de botellones y la mayor interacción social si no ha habido más contagios es porque la vacuna ha funcionado”, destacó. “No sé qué ocurrirá en noviembre o diciembre, teniendo en cuenta que con las nuevas medidas el nivel de interacción va a ser mayor, pero todo indica que seguiremos bien”, añade. “El año pasado hasta julio fuimos bien, y sin vacunar y sin un nivel de restricciones muy alto, y mira como acabó...”, apuntó. “Esperamos después de año y medio poder rematar esta pandemia y para ello tenemos que ser humildes. Si nos pegamos otro batacazo ya no tenemos la excusa de no conocer cómo funciona el virus”, abundó.

Destacó también que en octubre podrá haber festejos taurinos. En principio fiestas en las próximas semanas se descarta porque “no hay además tiempo material para organizarlas”. Respecto a los festejos taurinos, el ganadero Miguel Reta aseguraba ayer que se van a realizar encierros y sueltas de vacas en varios pueblos como Carcastillo, Villafranca, Cortes y Marcilla (estos dos últimos en plaza portátil) y Valtierra en diciembre. También recordó que habrá toros con soga en Lodosa.