La Clínica Universidad de Navarra ha iniciado un ensayo clínico para el tratamiento de pacientes con enfermedad de Párkinson avanzada, que sufren complicaciones motoras y afectación en ambos lados del cuerpo.

El estudio busca comprobar la utilidad de la técnica del HIFU (ultrasonidos focalizados de alta intensidad) en personas que son candidatas a la cirugía de estimulación cerebral profunda para la implantación de unos electrodos, pero que no acceden a esta intervención bien por su edad, bien porque no desean someterse a ella.

La Dra. María Cruz Rodríguez Oroz, directora del Departamento de Neurología de la Clínica Universidad de Navarra, explica que "pensamos que mediante la aplicación del HIFU en el tracto palidotalámico del cerebro se puede ayudar al control de los síntomas de enfermos con Párkinson en ambos lados del cuerpo, y con complicaciones motoras" y detalla que son pacientes "en los que la medicación ya no es eficaz durante todo el día y presentan movimientos involuntarios".

Desde 2018, la Clínica Universidad de Navarra ha realizado más de 250 intervenciones con HIFU, de los que más de un centenar son pacientes de Parkinson. El HIFU concentra mil fuentes de ultrasonidos de alta intensidad en un área señalada por el neurocirujano y, a través de esa energía proporcionada por los ultrasonidos, se produce una termocoagulación -una lesión- disminuyendo las neuronas o conexiones neuronales alteradas. Así, se consigue mejorar de inmediato los síntomas que el paciente pueda presentar.

Este ensayo clínico -desarrollado también en otros centros de Estados Unidos- probará el HIFU en el tracto palidotalámico, que conecta las zonas cerebrales del globo pálido y del área motora.

Las personas interesadas en participar en el ensayo pueden contactar con el Departamento de Neurología de la Clínica Universidad de Navarra (secrneurocun@unav.es).