No es lo habitual pero en cuestión de pocos meses dos vizcaínos han tenido que ser repatriados de dos países exóticos, Tailandia y Afganistán, donde se encontraban de vacaciones, por problemas de salud. Alex vino afectado de una pancreatitis; Araceli, herida de bala en un atentado. La situación que han vivido ambos ha llevado a la sociedad en general a replantearse la necesidad de asegurarse cuando se viaja.

Alex salió de la UCI hace ya unos días y se recupera bien. Está al tanto de las noticias y sin duda lo ocurrido con Araceli le ha hecho recordar su drama.

”He visto la noticia de Araceli y creo que ha tenido mucha suerte de que la traigan tan rápido de Afganistan. Pienso en lo que me ha pasado a mí y se me ponen los pelos de punta”, dice a DEIA desde el Hospital de Cruces donde todavía se encuentra ingresado. Pero, afortunadamente se ha quedado en una pesadilla. “Me encuentro bien. Estoy fuerte. Tengo un drenaje pero por fuera desde luego estoy mucho mejor. Espero que pronto me den el alta. No me han puesto una fecha, pero la evolución es positiva”.

Alex viaja desde hace diez años cada año a países exóticos. Ya ha estado en Cuba, Punta Cana, México, Nueva York y Tailandia. “Siempre voy con el seguro que te ofrecen en el agencia. El básico. Tu piensas que 100.000 euros de cobertura es suficiente, pero después de mi experiencia te das cuenta de que no cubre lo necesario si pasa algo así”.

Por eso mismo, “recomiendo a toda la gente que ya que te gastas 2.000 o 3.000 euros en un viaje, que se amplíe 100 euros más el seguro y por lo menos se asegure un millón de euros”. No tiene queja de los hospitales de Tailandia y reconoce que el problema fue el idioma.

A día de hoy a Alex se le han quitado las ganas de viajar. “Como mucho en territorio del Estado y si un día me vuelve a apetecer ir al extranjero antes de me hago una analítica para asegurar que estoy en perfecto estado” .