Navarra ha registrado en Salazar la primera muerte de ciervo por la fiebre hemorrágica epizoótica (EHE), la nueva enfermedad provocada por la picadura de un mosquito que hasta hace un año era desconocida en Europa. Fuentes del departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, indican que hay otros tres posibles casos en ciervos que presentan síntomas compatibles con esta enfermedad pero que todavía no se han constatado.

La consejería prevé que esta enfermedad remita en invierno, ya que el mosquito Culicoides está actualmente menos activo debido a las bajas temperaturas. Este vector principalmente ha atacado al ganado vacuno, y hasta el momento están perjudicadas 207 explotaciones de bovino en Navarra -el 14,1% del total-, con 644 animales afectados -el 0,7% del total-. De ellos han fallecido 48. “Las últimas semanas hemos tenido muy pocos casos en vacuno, por lo que la enfermedad ya está remitiendo”, explicaron desde el departamento.

Los técnicos de INTIA ya están llevando a cabo el estudio sobre esta enfermedad en las explotaciones, que se alargará hasta finales de febrero. “Con los datos de las primeras granjas analizadas en estas dos semanas, se ha observado que muchos animales no están afectados por la fiebre hemorrágica, pero que disponen de anticuerpos. Eso significa que probablemente en 2024 esos animales van a estar mejor protegidos”, detallaron.

La UE no había registrado casos de este mosquito en animales hasta 2022. El Ministerio de Agricultura informó de que históricamente la EHE ha circulado en América del Norte, Australia, Asia y África, pero nunca en la UE. El 10 de noviembre del año pasado, Italia comunicó la detección del virus en explotaciones de bovino en la isla de Cerdeña, después en Sicilia, y ocho días más tarde saltó al sur de España -el 21 de noviembre en Andalucía-. Aunque el mosquito se fija principalmente en el ganado vacuno, también son susceptibles de las picaduras ciervos, corzos y gamos (estos últimos no habitan en la Comunidad Foral).

Navarra ya ha contabilizado la primera muerte de un ciervo. Ante eso, Desarrollo Rural y Medio Ambiente explica cómo debe actuar un ganadero, un cazador u otra persona si se topan con ejemplares silvestres en estas circunstancias.

¿Cómo hay que proceder?

Si un ganadero o una persona que está cazando se encuentra con un animal que presenta sintomatología (debilidad y cojera, lengua fuera, lesiones en la mucosa oral y nasal, etc.) debe avisar a la Central de Medio Ambiente de Guarderío para que saque muestras que confirmen o descarten la enfermedad. Es esencial recordar en todo momento que la enfermedad, transmitida por un mosquito del género Culicoides, no es contagiosa y, sobre todo, que no se transmite a los humanos.

¿Adónde se lleva el animal?

Hay que avisar a Guarderío que actúa en función de cómo se encuentre el animal. El protocolo consiste en sacar una muestra de fluidos para confirmar o descartar el virus, o que la naturaleza siga su curso.