Osasuna Magna y ATP Iluminación Ribera Navarra entran a escena en la Copa del Rey de fútbol sala y lo hacen disputando esta cuarta eliminatoria muy lejos de sus pistas. El equipo de Irurtzun juega este miércoles en Melilla ante el Melistar, colista de la Segunda División, mientras que los de Tudela han viajado hasta la Región de Murcia para enfrentarse al Zambú CFS Pinatar Cerramientos Abatibles, rival que ocupa actualmente plaza de play off de ascenso a la máxima categoría. Ambos duelos comenzarán a las 21.00 horas.

Ninguno de los dos representantes navarros quiere sorpresas desagradables. La Copa es una competición que gusta y son conscientes de que, a un partido, y arropados por su afición, sus rivales pueden dar la campanada. No sería la primera vez que eso ocurre cuando se trata de enfrentarse a un equipo de inferior categoría. Es por ello que se pondrán las pilas desde el inicio del encuentro. En juego están los octavos de final del torneo.

Osasuna Magna se ha desplazado con toda su plantel hasta Melilla. Ahí le espera el farolillo rojo de la Segunda División, un Melistar que este pasado lunes destituía a su entrenador, Tomás de Dios, tras los malos resultados hasta la fecha y confiaba en su segundo, Javi Barroso, para tratar de revertir la situación. 

Y es que el Melistar encadena cinco derrotas seguidas en la Liga y su única victoria esta temporada –al margen de un empate– ha sido casualmente contra otro equipo navarro, el Vulcanizados Ruiz Tafa FS, al que ganó por 5-2. En la anterior ronda, los melillenses eliminaron al Exlabesa Leis Pontevedra FS.

“Es un equipo de mucha calidad, que hasta hace poco tenía un entrenador que había dirigido incluso en Primera División. Es un cambio que puede servir de acicate. No habían empezado muy bien a nivel de puntos, pero les he visto bien. Con un buen modelo de juego”, analizaba Miguel Hernández antes de partir. Y advertía: “Es fuera de casa, a un partido y contra un equipo de Segunda y, aunque sea de inferior categoría, es un encuentro complicado, en el que nos va a exigir para poder pasar la eliminatoria”.

El Xota se planta en esta cuarta eliminatoria después de caer en casa ante el Industrias Santa Coloma en el último suspiro, una derrota “que nos ha dolido mucho”. Además, una vez finalice el encuentro copero no vendrá a Pamplona, sino que se desplazará directamente a Ciudad Real, donde el sábado se enfrenta al Manzanares. “Para la gente que tenemos familia es un poco más duro, pero a la gente joven no le supone mucho”, comentaba el técnico navarro respecto a esta odisea.

El reto del ATP

Sin entrenador todavía en su banquillo tras la destitución de Daniel Ibañes –esta semana se podría conocer al nuevo técnico–, el ATP Iluminación Ribera Navarra deja aparcada momentáneamente la Liga para centrarse en la Copa. Visita al conjunto murciano del Zambú CFS Pinatar, equipo de Segunda División, oriundo de San Pedro de Pinatar.

La plantilla del ATP Iluminación Ribera Navarra, en los momentos previos a un choque. Ribera Navarra FS

Los riberos, en puestos de descenso con sólo 5 puntos en diez jornadas y tras encadenar tres derrotas, buscarán un impulso en la competición copera. Un pase a octavos que les dé confianza de cara a su próximo compromiso, el domingo en casa ante O Parrulo.

Enfrente tendrá un rival de dulce, que dejó por el camino copero al Gran Canaria FS, que ha cosechado cinco victorias consecutivas y goza de una posición privilegiada en puestos de play off por el ascenso a la elite –es 4º con 16 puntos–. Pese a este choque de dinámicas, el ATP Ribera tratará de reponerse y hacer bueno el viaje hasta tierras murcianas.