La oposición ha solicitado al Ayuntamiento de Pamplona un informe sobre la seguridad de la gran bandera de Navarra instalada en la plaza de los Fueros después de que por segunda vez en menos de cuatro meses haya acabado por los suelos.
El requerimiento ha sido formulado por el concejal de Geroa Bai Patxi Leuza durante la Comisión de Presidencia celebrada este martes.
Aprovechando el turno de ruegos y preguntas, ha solicitado al concejal delegado de Seguridad Ciudadana Javier Labairu, presente en la sesión, un informe sobre la instalación dados los problemas que está dando.
Leuza ha mencionado al último percance sufrido por la bandera XXL este lunes, cuando se desprendió del mástil de 30 metros que la sujeta. El concejal de Geroa Bai ha preguntado por la seguridad y por los efectos que puede ocasionar la caía de una bandera de las proporciones (8 x 12 metros) que presenta la de la plaza de los Fueros: “Podría tapar a 10 vehículos que pasaran por ahí” ha señalado de forma gráfica el representante de la coalición progresista, sin que obtuviera respuesta por parte del representante de Navarra Suma.
Según el Ayuntamiento, la caída de este lunes se produjo por la rotura de uno de los enganches de sujeción.
La bandera, muy mojada por las fuertes precipitaciones de estos días, fue recogida del suelo por varios empleados municipales. Sucedió lo mismo a finales de octubre, aunque en aquella ocasión el viento rasgó la tela hasta romperla.
Bandera de recambio en octubre
El Ayuntamiento la repuso inmediatamente (más tarde se supo que había una de repuesto) pero no evitó que el concejal Fermín Alonso tuviera que dar explicaciones a los grupos de la oposición, muy críticos con el equipo de Gobierno por el alto coste que ha supuesto la instalación (178.000 euros).
El representante de Navarra Suma desveló que desde el primer arriado a mediados de septiembre el Ayuntamiento recibe las alertas que emite AEMET por vientos superiores a 70 kilómetros por hora. También dijo que cada bandera nueva cuesta 1.000 euros.
La que se cayó este lunes fue izada el 25 de octubre, “sin que desde ese día se hayan producido en la ciudad vientos de gran velocidad ni alertas por alta probabilidad de vientos que pudieran superar los 70 kilómetros por hora, por lo que el Ayuntamiento entiende que hay un defecto de fabricación” se aseguraba en la nota emitida ayer lunes por el equipo de prensa municipal.
El izado de la nueva bandera se pospondrá a la semana que viene, pues es lo aconsejable según la previsión meteorológica para estos próximos días.
El mástil, de más de 30 metros de altura, es de acero al carbono galvanizado y lacado y cuenta con una driza interna motorizada para el izado y arriado de la bandera.
En la parte superior cuenta con luz de obstáculo de aviación y pararrayos. El soporte de la cimentación se ha llevado a cabo mediante la mejora de las condiciones del terreno: se obtuvo con la implantación de un ligero micropilotaje. La base del mástil dispone, adicionalmente, de proyectores de iluminación para la bandera.
