El Parlamento de Navarra ha aprobado este lunes por unanimidad una declaración institucional que denuncia el espionaje a la exconsejera del Gobierno de Navarra, Mari José Beaumont, y reclama "depurar responsabilidades". El texto considera "de extrema gravedad" e "impropio de un Estado de derecho" lo sucedido y pide que se llegue "hasta el fondo de esta cuestión".

La declaración llega después de que la semana pasada se hiciera público que Beaumont, consejera de Interior en el Gobierno de Uxue Barkos, fue sometida a un espionaje por parte de la cúpula del Ministerio del Interior del Gobierno de Mariano Rajoy.

Según la información conocida, el número dos del Ministerio reclamó a un responsable de la unidad de investigación de la Policía Nacional que indagara en el "entorno" de la consejera por había "cosillas" que poder utilizar en su contra. La conversación se produjo nada más tomar posesión como consejera del Gobierno.

En concreto, el texto aprobado, de tres puntos, recoge que "el Parlamento de Navarra considera de extrema gravedad e impropio de un estado de derecho que se haya podido espiar a una consejera del Gobierno de Navarra".

Además, el Legislativo "manifiesta su voluntad de que se llegue hasta el fondo de esta cuestión para conocer si ha podido haber más miembros del Gobierno de Navarra en la misma situación". Finalmente, el Parlamento pide que se depuren responsabilidades y se adopten las medidas necesarias para que este tipo de hechos no vuelvan a suceder.

La valoración de los partidos

Tras la reunión de la Mesa y Junta de Portavoces los grupos que formaron parte del cuatripartito la pasada legislatura han mostrado apoyo y solidaridad con Beaumont, y han subrayado la gravedad de los hechos. Han considerado que fue un ataque no solo contra la consejera de Interior, sino contra el conjunto del Gobierno del cambio salido de las urnas en 2015.

En ese sentido, tanto EH Bildu como Izquierda Unida han anunciado que presentarán varias preguntas en el Congreso. “No puede ser, es inaceptable. Mostramos todo nuestro apoyo a quien fue nuestra compañera”, ha señalado Marisa de Simón. En esa línea, por parte de Podemos, Ainhoa Aznárez ha trasladado un “caluroso abrazo” a Beaumont y ha denunciado que esta “persecución política, mediática y policial” forma parte una estrategia para desacreditar a los rivales políticos del PP.

Por parte de EH Bildu, Adolfo Araiz ha mostrado su “solidaridad” con Beaumont y atribuido el espionaje a “espurios intereses políticos” para intentar evitar el cambio en Navarra. “Esto lo que confirma es la obsesión de las cloacas del Estado con la izquierda soberanista vasca, sobre todo en Navarra, que sigue siendo cuestión de Estado”, ha denunciado Araiz, que ha criticado que “los poderes fácticos de Navarra” no dudaran en acudir a los “tentáculos del régimen del 78” para frenar el cambio de Gobierno.

Claramente molesta se ha mostrado también la parlamentaria de Geroa Bai, María Solana, que compartió Gabinete con Beaumont. "Como compañeras del Gobierno e integrantes del Parlamento creemos que no se podía dejar pasar un hecho como este sin un posicionamiento institucional que lo denuncie. El Parlamento debe tomar noción y conciencia de la situación en la que este espionaje pone a las instituciones navarras, y en especial a quienes forman parte del Gobierno", ha advertido Solana.

UPN y PSN recuerda que ETA también espiaba

Por parte del PSN, Ramón Alzórriz ha considerado "intolerable" que en democracia los políticos no puedan ejercer su labor "con tranquilidad y sin ser espiados", pero ha recordado que concejales del PSN también fueron "espiados" para después ser asesinados por ETA. "Siempre estamos en la misma posición. Concejales del PSN en época democrática también fuimos perseguidos y se pasaron informes, y no al Gobierno de España sino a la banda terrorista de ETA. Y no vi tanto compromiso y declaración por parte de algunos que traen hoy aquí ese tema. Reivindicamos la política para defender las ideas sin miedo y con un compromiso claro por la democracia antes, ahora y siempre", ha argumentado Alzórriz.

Con similares argumentos se ha expresado también el portavoz de UPN, Javier Esparza, que considerado "muy grave" el espionaje. "UPN nunca ha avalado este tipo de prácticas ni las va a tolerar", ha señalado Esparza, que sin embargo ha querido recordar que "concejales, parlamentarios y consejeros de UPN también fueron espiados". "Se les hizo seguimientos para asesinarlos, con el aplauso y el beneplácito de EH Bildu. Y ahora esos que hacían seguimiento están en sus filas. ASí que no se haga la víctima", ha señalado.